Red Hat acaba de anunciar el lanzamiento de una nueva solución con la que la compañía pretende revolucionar el mundo cloud, especialmente, en todo aquello relacionado con las infraestructuras como servicio (IaaS). Se trata de CloudFormrs un producto capaz de gestionar de forma global el ciclo de vida de aplicaciones, además permitir la creación de nubes integradas a partir de una amplia gama de recursos de computación con portabilidad entre entornos físicos, virtuales y de cloud computing.
Como parte de ello, hay que destacar que CloudForms, al incorporar gestión del ciclo de vida de aplicaciones, permite controlar y gestionar el portfolio de aplicaciones en el cloud, con un valor añadido: de acuerdo con la firma, CloudForms responde a los principales problemas encontrados por la primera generación de productos para la nube como son el coste y la complejidad de la proliferación de servidores virtuales, la dificultad de cumplir con las normas y los fallos de seguridad. Dentro de esta característica, una vez definidas las aplicaciones, éstas se pueden desplegar, gestionar y mover entre diferentes nubes, entornos de virtualización y servidores.
De forma paralela, se encuentra también entre sus novedades la capacidad de crear cloud híbridas utilizando los recursos existentes de computación, y que incluyen: servidores virtuales, de diferentes fabricantes, como Red Hat y VMware; una amplia gama de cloud públicas procedentes de Red Hat Certified Cloud Providers como Amazon, IBM y NTT Communications; y, servidores físicos tradicionales, ya sea internos o en hosting, incluyendo blades y racks de alta densidad.