Los resultados del segundo trimestre del ejercicio fiscal de 2009 de Oracle han estado en línea con los que obtuvo hace un año, y según los expertos esto significa tener un “crecimiento cero”. Éste ha sido uno de los trimestres más duros para la compañía cuyo porcentaje de crecimiento para los beneficios por acción ha caído un 11 por ciento.
En total, Oracle ha sumado una facturación de 5.600 millones de dólares, esto es tan sólo un seis por ciento más que hace un año. Pero, si no se tuviera en cuenta el fortalecimiento del dólar, este aumento sería del 12 por ciento ya que la compañía genera la mitad de sus ventas fuera del mercado de Estados Unidos. En los tiempos que corren no es un ratio tan malo comparado con los que están obteniendo el resto de fabricantes; sin embargo, en 2007, la compañía aumentaba sus ingresos un 28 por ciento. Además, Oracle también ha visto disminuir un uno por ciento su beneficio neto para este segundo trimestre hasta los 1.300 millones, cuando el año pasado lo aumentaba un 35 por ciento.
Y es que, aunque aún registra beneficios, la crisis está pasando factura a Oracle. El negocio de Software le ha reportado unas ventas de 4.500 millones de dólares, esto es un ocho por ciento más, pero los ingresos procedentes de nuevas licencias han disminuido un tres por ciento. El área de Servicios también ha bajado, un dos por ciento hasta los 1.100 millones, sin embargo, las actualizaciones de software y soporte de producto o mantenimiento aumentaron más del 14 por ciento hasta los 2.900 millones.
En el ejercicio anterior, Oracle barajaba unas cifras de crecimiento para el negocio de Software del 29 por ciento y del 22 por ciento para Servicios.
No obstante, para Larry Ellison no son tan malos resultados. Han conseguido incrementar el beneficio operativo un 11 por ciento y el margen operativo, un 35 por ciento. Además, Oracle ha generado un cash flow de 7.600 millones de dólares en estos últimos 12 meses, más del 15 por ciento que el año pasado. Y eso que los analistas de Wall Street se esperaban peores noticias, incluyendo la posibilidad de que Oracle pudiera anunciar el inicio de una ronda de despidos para ahorrar costes.
De cara al futuro, Ellison sigue mostrándose positivo con unas previsiones para el tercer trimestre de engrosar su facturación de un ocho a un 11 por ciento.
