El Plan de Desarrollo Informático (PDI), que se empezó a elaborar en 1992, marcó el punto de inflexión y de ruptura en la evolución informática de Metro de Madrid. Bajo los criterios de una previa reorganización de los flujos de información y procesos de negocio de la empresa, se implantó un nuevo sistema de gestión que permitiese a los usuarios contar con las herramientas precisas para optimizar su labor: una profunda transformación que situó al usuario en el centro de un sistema soportado en SAP R/3 y arquitecturas cliente/servidor administradas por equipos de Sun (Solaris).
Hasta 1992, la evolución de la informática de Metro de Madrid fue el fiel reflejo de los patrones seguidos por otras grandes empresas de la época: un equipo central soportado en un entorno operativo propietario de proceso (MVS, CICS, DB2) sobre el que se utilizaba un sistema de información desarrollado internamente en su mayor parte, y un conjunto de ordenadores departamentales aislados por la falta de una estructura corporativa de comunicaciones y por la moda de una informática distribuida que tantos quebraderos de cabeza produjo en muchas compañías. El resultado final, como afirma Fernando Gómez, gerente de Sistemas de Información, “era un sistema de información compuesto por soluciones aisladas que utilizaban sus propias estructuras y bases de datos, y un conjunto diverso y disperso de equipos hardware, lenguajes y herramientas software, en muchos casos incompatibles”.
Los nuevos planes de negocio de la empresa hacían inviable continuar con este escenario tecnológico. Cualquier posible vía de solución debía quedar arropada por una modernización de las arquitecturas tecnológicas como consecuencia final de un trabajo previo de reingeniería, tanto de los procesos de negocio como de los flujos de información. En definitiva, el PDI era un proyecto más amplio que un típico plan de sistemas y sus objetivos mucho más ambiciosos: realizar un análisis detallado de la información que se manejaba en la empresa y valorar tanto su tratamiento como los medios empleados. Sólo tras realizar este estudio, que contó con la colaboración de Iecisa (Informática El Corte Inglés), se empezaron a tomar las decisiones sobre las que ha gravitado la estrategia de sistemas de Metro de Madrid durante la última década. Una estrategia que, según Gómez, “ha estado siempre centrada en conseguir la mayor eficacia de los sistemas y de la información procesada”.
La implantación del nuevo proyecto requería quemar con rapidez algunas etapas: buscar un sistema de gestión corporativo, crear un nuevo entorno de sistemas y construir una red de comunicaciones capaz de soportar el crecimiento de la instalación.
El PDI puso de manifiesto la necesidad de buscar un nuevo sistema de gestión empresarial, ya que el anterior se había quedado obsoleto, mostrándose incapaz de aportar soluciones a los nuevos requerimientos del negocio, y era muy costoso de mantener, exigiendo crecientes recursos humanos y económicos: el bosque de interfaces era tan poblado que cualquier modificación se convertía en una tareas muy costosa y, en ocasiones, imposible.
Tras analizar diferentes soluciones de marcado, Metro de Madrid apostó finalmente por una plataforma basada en SAP R/3 sobre un entorno operativo Sun/Solaris y de bases de datos Oracle. A día de hoy, la empresa ha profundizado en esta plataforma utilizando prácticamente todos sus módulos para alcanzar dos principio fundamentales, que Fernando Gómez resume en los siguientes términos: “dato único y proceso único, evitando las duplicidades de datos y los procesos redundantes. Que sólo haya un estamento responsable de los datos y de actualizarlos en tiempo real”. Puede decirse que la elección de R/3 define la estrategia de sistemas de Metro de Madrid volcada hacia el usuario y con una clara vocación por estructuras cliente/servidor en el marco de un sistema integrado de gestión que asegure su propio crecimiento.
Un crecimiento que se ha visto respaldado con la reciente evolución hacia el entorno mySAP.com. El pasado mes de enero, Metro de Madrid cambió todas sus licencias R/3 por licencias mySAP.com apostando una vez más por la estructura conceptual suministrada por el desarrollador de la plataforma. No sólo se trata de aprovechar las nuevas herramientas que ofrece la nueva solución (como podría ser el caso del módulo de prevención de riesgos laborales), si no de afrontar el futuro de la empresa en los nuevos escenarios propiciados por el negocio electrónico y las relaciones con clientes y proveedores.
Un futuro que también necesita de una infraestructura de telecomunicaciones con las suficientes prestaciones para canalizar tráficos de datos progresivamente crecientes. Si hace diez años, la red de la empresa daba cobertura a doscientos puntos de conexión, actualmente está capacitada para soportar cerca de diez mil. Un esfuerzo que se ha fraguado con la construcción de una red privada de datos soportada en un backbone ATM capaz de interconectar a todos los usuarios de la empresa y que permite darles acceso, sin cortapisas de velocidad o ancho de banda, a las aplicaciones más complejas.
Dentro de la misma estrategia de modernización de los sistemas, Metro de Madrid ha desarrollado los componentes de optimización y visualización de Ilog para rentabilizar sus recursos -de infraestructura y humanos-, supervisar el estado de los trenes en todo momento y ordenar acciones directas al sistema para ajustarse a eventos. Con esta implantación, cerca de 550 millones de viajeros anuales se beneficiarán de las decisiones de operación que se adopten a partir de la información registrada en el sistema.
Metro de Madrid utiliza las herramientas de Ilog para agilizar dos de sus principales procesos de negocio: la asignación de personal a puesto (Nombramiento de Servicios) y la gestión de depósitos y líneas (GDL). Para procesar sus servicios de forma óptima, la compañía metropolitana debe procesar gran cantidad de información en tiempo real, de modo que permita al operador tomar rápidamente las decisiones adecuadas y mantener un óptimo control sobre la explotación ferroviaria. “La aplicación que integra esta tecnología constituye un sistema de control en tiempo real y amigable para el usuario que acelera las decisiones de los operadores, mejorando la gestión en su conjunto y automatizando un gran número de tareas que antes se hacían manualmente”, explica Gómez.
Metro de Madrid ha construido un sistema de Nombramiento de Servicios que mediante la utilización de Ilog Solver rentabiliza al máximo la disponibilidad de los recursos humanos, resolviendo la complejidad que imponen un elevado número de reglas y restricciones que conforman el marco de referencia laboral de todo el personal implicado (cerca de 2.600 profesionales) en la explotación del sistema ferroviario (gestión de personal, derechos adquiridos, turnos, descansos, convenios laborales, etc.), así como un sinfín de vicisitudes en la previsión de demanda (clima, vacaciones, averías, aspectos estacionales, eventos culturales y deportivos, etc.).
El segundo sistema implementado con esta tecnología es el de Gestión de Depósitos y Líneas, que permite gestionar el negocio de la empresa en tiempo real, registrando y visualizando la información relativa a los trenes que se encuentran circulando en las líneas y de aquellos ubicados en los depósitos de material móvil para obtener los datos relativos a incidencias, averías y otras circunstancias propias de la explotación. Adicionalmente, esta aplicación dispone de una interconexión con el módulo de mantenimiento, lo que mejora la capacidad de reacción de la empresa para ajustarse a la demanda.