La crisis también está pasando factura al fabricante chino Lenovo, que está considerando una reestructuración, según la agencia Reuters. Al parecer, el cuarto fabricante de PC del mundo está considerando la posibilidad de fusionar sus divisiones de operaciones en China y Rusia con la división que se encarga del resto de países presentes en Asia-Pacífico. De hecho, se baraja la posibilidad de que Chen Shaopeng, presidente de la unidad que dirige las operaciones chinas, sea el responsable de la nueva división.
En lo que se refiere a los trabajadores, los ejecutivos de la firma no tienen planes, de momento, para aligerar su plantilla de productores, aunque desde la compañía no se han expresado oficialmente sobre todos estos extremos.
Lenovo obtuvo una caída del 78% en los resultados de su último trimestre (finalizado en noviembre), hasta los 23,44 millones de dólares de beneficio neto.