Dell e Intel han dado a conocer los resultados de la última fase de un estudio llevado a cabo durante varios años denominado ‘Evolving Workforce Study’, que incluye las opiniones de 8.360 trabajadores en todo el mundo y las respuestas a entrevistas de 29 expertos y líderes empresariales. Una de sus conclusiones más relevantes es que el hecho de incentivar a los trabajadores a través de la tecnología y la movilidad mejora la productividad en la oficina. Además, la consumerización de la tecnología depende de una actitud abierta por parte de las empresas, y su éxito será más probable si se establecen unos parámetros específicos y predefinidos en su implantación.
Sin embargo, el estudio muestra que las empresas aún están lidiando con los problemas de seguridad y las amenazas que estas iniciativas pueden representar. Efectivamente, las empresas se están esforzando por comprender la importancia de crear infraestructuras tecnológicas que apoyen la evolución hacia trabajadores más expertos desde un punto de vista digital. Pero una mayor posibilidad de elección de la tecnología, supone un aumento de las preocupaciones en torno a los protocolos y los riesgos de seguridad, como el hacking o la pérdida de datos.
Por otra parte, los líderes empresariales entienden que la llegada de los tablets, smartphones y el cloud computing han creado la necesidad de que las empresas acepten el desafío de ser más móviles. Muchos expertos creen que la convergencia de las aplicaciones a través de diferentes dispositivos provocará una mayor dependencia de la movilidad entre los trabajadores en el futuro, lo que significa que los negocios que quieran ser más productivos, deben solventar sus preocupaciones actuales para estar preparados para la movilidad.
