R. Contreras (Praga)
La capital checa ha sido el foro elegido por Intel para mostrar los avances que aporta su nueva arquitectura en términos de rendimiento y eficiencia, abanderando su flamante procesador Xeon 7400 Series de seis núcleos y la renovación de la tecnología vPro con la que se gestionan y securizan en remoto PCs corporativos. “El nuevo procesador está demostrando su liderazgo en rendimiento en diferentes bancos de pruebas incluyendo virtualización, bases de datos, planificación de recursos empresariales y comercio electrónico”, señaló Boyd Davis, general manager de Server Products Group Marketing deIntelque ofició de maestro de ceremonias.
Como dato significativo, este chip ha permitido a IBM alcanzar 1.2 tpmC (un banco de pruebas que mide las transacciones por minuto) con su System x 3950 M2. “Para lograr estos niveles de rendimiento, hace tres años las organizaciones hubieran tenido que recurrir a enormes y costosos servidores”, aclaró Davis. Las grandes corporaciones están demandando el rendimiento de los datos, sólo en tres años la información corporativa se ha multiplicado por 50. También reclaman mayor estandarización y una utilización flexible de los datos.
En este estado de cosas, la nueva gama Intel Xeon 7400 quiere jugar un papel decisivo: “Con seis núcleos, gran cache compartida y capacidades avanzadas de virtualización puede postularse como plataforma ideal para infraestructuras virtualizadas al tiempo que consigue récords mundiales en rendimiento y eficiencia energética”, argumentó Davis para explicar que. “con este lanzamiento, Intel se posiciona en la vanguardia del segmento de servidores de alta gama”. Una gran oportunidad de negocio si se tiene en cuenta que el 82 por ciento de los recursos de los centros de datos (servidores, almacenamiento y redes) tienen una utilización de solo el 10 por ciento.
El nuevo Xeon Series 7400 ha sido concebido con el fin de abordar tres capítulos cruciales: un diseño eficiente, un rendimiento sin precedentes y, lo que es más importante, la protección de la inversión. En primer término, ha sido diseñado con tecnología de 45 nanomicras y mejora los horizontes de la arquitectura Intel. Además de sus seis núcleos, incorpora una memoria cache L3 compartida de 16 Mb. Comparado con su gama antecesora 7300, muestra significativas mejoras en la ejecución de aplicaciones como bases de datos, ERPs y comercio electrónico.
El otro gran anuncio realizado en Praga fue la nueva generación de vPro para PCs corporativos, una tecnología lanzada en 2006 y que ya ha sido adoptada por el 60 por ciento de las 100 compañías Fortune y unas 350 compañías de EMEA para gestionar y securizar las tareas realizadas en sus ordenadores de forma remota. Entre las firmas que han optado por vPro se encuentran las británicas Green School y la Universidad de Plymouth o las españolas Banco Popular y Telefónica.
McCreary es el nombre la nueva criatura que se compone de tres elementos: un procesador (que puede ser Core 2 Duo o Core 2 Quad), un chipset (Intel Q45 Express Chipset), que incorpora tanto la tecnología de gestión activa como de virtualización, y un chip de red que permite la gestión activa.
Davis destacó las grandes aportaciones de esta tecnología que ha permitido “reducir la ocupación de los administradores de sistemas y rebajar sensiblemente las emisiones de ozono”. Como ejemplo, el directivo describió el caso de éxito del Estado de Indiana que ha conseguido, a través de vPro, bajar al 80 por ciento las incidencias del administrador de sistemas (con un ahorro calculado por encima de 1,38 millones de dólares en cuatro años) y el 45 por ciento en consumo eléctrico (1,38 millones de dólares).
“El nuevo Xeon es una poderosa plataforma para Hyper-V”
Bob Visse, senior director de Windows server marketing de Microsoft, uno de los socios tecnológicos de Intel, junto con IBM y VMware, señaló que la colaboración entre ambos cosechando importantes logros en el ámbito de la virtualización. “El nuevo Xeon 7400 Series es una poderosa plataforma para nuestras soluciones Hyper-V y hemos trabajado estrechamente para asegurar que nuestro software obtiene todas las grandes ventajas de la funcionalidad de virtualización con la que está dotado el hardware de Intel”, señaló Visse.
Una de las mayores áreas de cooperación ha sido en el capítulo de la reducción del gasto energético de manera que los procesadores Xeon gestionan por defecto el consumo de Windows Server 2008. “De hecho se trata del primer Windows Server que contempla esta función en nativo. soporta una completa gestión P-state y C-state”, explicó el directivo de Microsoft. P-state utiliza la tecnología SpeedStep de Intel para ajustar el voltaje y la frecuencia en respuesta a la carga del procesador, y C-state utiliza estados de bajo consumo durante los períodos de inactividad. El gestor Hyper-V ha sido optimizado para controlar las tasas de transferencia en el procesador multi-core. Las decisiones del gestor del hipervisor están basadas en NUMA y en la topología de CPU.
“De esta manera se convierte en una solución de virtualización que mejora los costes ya que optimiza el uso de los recursos y aporta una infraestructura más ágil”, concluyó Visse.