“La computación cuántica ya está aquí y tendremos que ponernos a trabajar en ella desde ya, si no queremos perder la oportunidad”. Esta contundente afirmación de Guido Peterssen Nodarse, director de Operaciones de aQuantum, resume el sentido de la segunda Sesión Magistral de Computación Cuántica, organizada por AUSAPE. Una sesión en la que se dieron algunas claves para que las organizaciones puedan ponerse manos a la obra para aprovechar las ventajas que ofrece esta tecnología antes que la competencia.
A la pregunta de “¿cómo puedo empezar a utilizar las tecnologías cuánticas?”, Alfonso Rubio Manzanares, cofundador y CEO de Entanglement Partners y uno de los ponentes de la Sesión Magistral, señaló que lo primero es crear un equipo multidisciplinar, formado por físicos, matemáticos, ingenieros…, para empezar a redactar un roadmap de despliegue de tecnologías cuánticas. Trabajar conjuntamente con universidades, centros de investigación y tecnológicos, y seleccionar proveedores con experiencia y solvencia también es altamente recomendable.
Además, es fundamental revisar aquellos problemas o retos que hasta el momento se pensaba que eran irresolubles y confrontarlos con las tecnologías cuánticas. Al fin y al cabo, según Rubio, las aplicaciones son en general las mismas que en la computación tradicional; simplemente los ordenadores cuánticos son capaces de realizar tareas que los tradicionales no alcanzaban a resolver.
Para que sea útil desde el punto de vista del negocio, la computación deberá ser híbrida, con sinergias entre el software cuántico y el clásico
Hoy en día, la computación cuántica presta especial atención a resolver problemas de optimización y clasificación. Los grandes sectores que están trabajando en tecnologías cuánticas son el financiero, aeronáutico, automotriz, farmacéutico, biotech y químico, pero ya estamos inmersos en la “tercera revolución cuántica”, en la que esta tecnología realmente disruptiva va a cambiar el mundo, incluyendo el mundo de los negocios. Rubio aventuró que “dentro de dos o tres años empezará a haber algoritmos cuánticos enlatados para su uso”.
En este panorama, EEUU y China, inmersos en una confrontación por la supremacía mundial, llevan la delantera. Las inversiones en Europa, por contra, son más bien modestas, de unos 1.000 millones de euros, aunque en España “hay mucho talento cuántico”, con grandes expertos destacados a nivel mundial. Entre los proyectos más interesantes en nuestro país, mencionó los programas de entidades como el ICFO (Instituto Catalán de Fotónica), el CSIC, las asociaciones Ametic y Quantum World Association, y el think tank Bqb.
El software cuántico en el mundo real
El desarrollo de software cuántico en el mundo real, por su parte, fue el protagonista de la ponencia de Guido Peterssen, que aportó una perspectiva más práctica a la Sesión Magistral de Computación Cuántica.
Los grandes sectores que están trabajando en tecnologías cuánticas son el financiero, aeronáutico, automotriz, farmacéutico, biotech y químico
Peterssen planteó que medidas debemos tomar para adoptar ya el software cuántico. Hay que conocer bien qué tipo de software queremos desarrollar -software para el hardware cuántico, software cuántico o aplicaciones cuánticas-, las características del equipo de desarrollo, que debe ser un equipo polímata para crear este software; de qué tipo de hardware cuántico disponemos, y los lenguajes y kits para desarrollar software que utilizaremos.
Además de conocer estas cuatro consideraciones principales, hay que asumir que el software cuántico va a coexistir durante mucho tiempo con el software clásico. Para que sea útil desde el punto de vista del negocio, la computación deberá ser híbrida: clásica-cuántica. En este modelo híbrido, desde un ordenador clásico se accede a los servicios de un computador cuántico, cuya respuesta utilizaremos en el negocio del día a día.
Peterssen recordó que estamos acercándonos a un momento donde la implementación de tecnologías de computación cuántica supone riesgos asumibles. De este modo, la adopción de estas tecnologías no deja de crecer: el 81% de las empresas del Forbes 1000 reconoce que intentarán implementar un caso de uso de computación cuántica aplicado a su negocio en los próximos años. Y entre los usuarios actuales, hay empresas punteras de los principales sectores. En cuanto a negocio, esto va a empezar a dar resultados a corto plazo, aseguró el experto.