Intel no está dispuesta a permanecer en silencio, tras la sanción histórica que la Comisión Europea (CE) le impuso el pasado mayo por abuso de posición dominante. Intel ha hecho público un documento en el que acusa al organismo regulador de realizar un uso selectivo de las evidencias con el objetivo último de encontrar a la compañía culpable.
Intel hizo público este documento el lunes, menos de una semana después de interponer un resurso formal de primera instancia ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea en Luxemburgo, y el mismo día en que se publicaba otro documento en el que la CE detalla el intercambio de correos electrónicos entre Intel y los fabricantes de ordenadores; un contenido que los expertos en materia de competencia de la CE han calificado de evidencia determinante a la hora de imponer a Intel la citada sanción histórica de 1.060 millones de euros (1.450 millones de dólares). En la versión no confidencial del documento 518 páginas publicado por la CE se incluyen los mensajes de correo electrónico utilizados como evidencia del dudoso modo en que Intel y los fabricantes de PC negociaban sus acuerdos.
De acuerdo con el comunicado de Intel, la CE no ha actuado correctamente en el caso e inició la investigación predispuesta a confirmar una culpabilidad preconcebida, utilizando con ese objetivo último las evidencias. La compañía que dirige Paul Otellini también considera que la CE ha fallado a la hora de comprender el contexto competitivo de los mercados PCs y de procesadores x86, y el modo en el que Intel compite con su archirival AMD.