“Todo comenzó con pequeños proyectos green que prometían un retorno de la inversión en menos de un año y que eran sencillos de poner en práctica. La compañía introdujo estas nuevas medidas en el centro de informática que tiene en Augsburgo y consiguió reducir el consumo de energía de casi tres millones de kWh al año a dos millones, además de disminuir en casi un tercio las emisiones de Co2“, explica Ignacio Garicano, director de Marketing de Fujitsu Siemens Computers. Así, con la idea de gastar la mínima energía posible, se emprendieron dos medidas esenciales, por un lado, la virtualización y por otro, la consolidación de sistemas Bladeframe.
Otra medida que ha implantado Fujitsu ha sido el incremento de la temperatura media a 25ºC, supuso un ahorro de entre un 15 y un 20 por ciento en el consumo de energía del aire acondicionado. “Aún así, el mayor potencial medioambiental lo encontramos en las impresoras. Realizar un uso controlado, eficiente y llevar a cabo sencillas medidas como imprimir a doble cara o en blanco y negro, contribuyó a controlar el gasto de los consumibles, al mantenimiento de las impresoras y a cuidar el medio ambiente, al tiempo que se evitaba un derroche innecesario de papel”, afirma Garicano. Gracias a estas medidas, que han tenido un periodo de implantación de unos dos años, la compañía ha conseguido unos ahorros de costes internos de hasta un 20 por ciento.
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