Ericsson comienza a superar la crisis. La compañía sueca de telecomunicaciones registró en el cuarto trimestre de 2003 un beneficio neto de 142 millones de coronas suecas, (unos 15,5 millones de euros), frente a la pérdida neta de 8.329 millones de coronas suecas (910 millones de euros) del mismo trimestre del año anterior. En lo que respecta a la facturación, ésta cayó un uno por ciento con respecto al mismo periodo de 2002, hasta los 36.227 millones de coronas suecas (3.962 millones de euros).
Tras el pinchazo de la burbuja tecnológica y la consiguiente caída de las ventas, el fabricante sueco ha vivido 10 trimestres consecutivos de pérdidas, periodo que ha tratado de compensar con una fuerte política de reestructuración. Ahora, y tras presentar los resultados, Carl-Henric Svanberg, presidente de Ericsson, ha matizado que la parte más importante de la reestructuración ya ha concluido y la compañía está en camino de superar la crisis y de mirar con optimismo el futuro.
