La gestión del almacenamiento está evolucionando rápidamente.
Impulsados por la IA y la transformación digital, los centros de datos deben lidiar con el enorme crecimiento de datos, las exigencias de agilidad y la escalada de la complejidad, además de afrontar la escasez de profesionales cualificados y el coste energético.
El futuro del almacenamiento se basa en perfiles de rendimiento del almacenamiento fijados por el cliente y seleccionados a través del autoservicio o totalmente automatizados en el entorno de la aplicación mediante el almacenamiento como código y los orquestadores.
Las organizaciones IT inteligentes transformarán el papel del administrador de almacenamiento para que se parezca a un gestor de producto, lo que definirá los productos mediante conceptos de abstracción como las políticas y las clases de almacenamiento.
Esto permitirá el autoservicio por parte de las plataformas de orquestación y los clientes internos de las organizaciones, dejando al nuevo administrador gestionar flotas de dispositivos en vez de matrices de almacenamiento individuales, supervisar el uso de los servicios existentes y crear nuevas ofertas.
Para permitir este modelo operativo en la nube, algunos proveedores ofrecen plataformas en las que los administradores gestionan y añaden capacidad a su flota de dispositivos de almacenamiento de manera no disruptiva, y definen clases de almacenamiento, políticas y zonas de disponibilidad a disposición de sus clientes.
Además, los desarrolladores que usan plataformas de infraestructura como código pueden especificar la clase de almacenamiento que quieren para una aplicación, codificarlo en plantillas, probarla e implementarla.
Almacenamiento as-a-Service
Para entornos de contenedores totalmente automatizados, las empresas deben optar por la plataforma líder de datos de Kubernetes de nivel empresarial para aplicaciones modernas.
Esta proporcionará gestión del almacenamiento para los clústeres de Kubernetes con despliegue automatizado y escalado de almacenamiento persistente, además de protección de datos.
Algunas soluciones incluyen incluso servicios de datos, como un conjunto de bases de datos seleccionadas para su uso en entornos Kubernetes, que se despliegan con solo pulsar un botón, lo que ahorra mucho tiempo a los desarrolladores.
Cabe recordar que habilitar el autoservicio mientras se sigue dependiendo de los largos ciclos de compra y entrega deja a la organización expuesta al riesgo.
La adopción plena de estos conceptos implica consumir las plataformas de almacenamiento subyacente as-a-Service, para permitir un escalado rápido cuando sea preciso, ofrecer flexibilidad y evitar invertir en hardware antes de que sea necesario.
Las empresas deben fijarse en la tecnología de un proveedor además de examinar su capacidad para proporcionar unos modelos de consumo flexibles y bajo demanda de sus plataformas.
Las empresas deben fijarse en la tecnología de un proveedor para proporcionar unos modelos de consumo flexibles y bajo demanda de sus plataformas
Existen proveedores de almacenamiento que ofrecen todo esto, y la ventaja de trabajar con un solo proveedor es que los conjuntos de productos integrados generan eficiencias en toda la estructura.
Que todas las matrices de almacenamiento flash estén conectadas a través de un único entorno operativo permite que las cargas de trabajo se puedan gestionar a escala en toda la empresa desde una única vista junto con una plataforma de datos Kubernetes.
También hay beneficios enormes en cuanto a la eficiencia energética y de uso.
Algunos proveedores all-flash ofrecen una eficiencia energética hasta un 85% mayor que la de los productos all-flash de la competencia y un tamaño mucho menor para maximizar la eficiencia del centro de datos.
Trabajar con un proveedor capaz de ofrecer todo esto mediante una oferta de almacenamiento como servicio flexible, y respaldada por acuerdos de nivel de servicio (SLA), que garantiza el uso energético, cero migraciones de datos y actualizaciones no disruptivas, es la clave para lograr una gestión del almacenamiento optimizada y moderna.
