Muchos responsables de Tecnologías de la Información, aunque son conscientes de la importancia que tiene la calidad en sus empresas y a pesar de las inversiones, no consiguen los resultados esperados. No obstante, el 63% de las compañías ya han comenzado a trabajar en la calidad dentro de sus aplicaciones desde hace más de tres años.
El estudio “Prácticas actuales de garantía de calidad: ¿cómo podemos continuar mejorando?” fue elaborado por la consultora Forrester mediante entrevistas personales con más de 305 responsables, tanto en Estados Unidos como Europa. Sus conclusiones no son del todo alentadoras, ya que del 54% de empresas que han invertido en calidad de las aplicaciones, sólo el 29% han reconocido haber obtenido mejoras importantes, mientras que un 2% aseguró que no han apreciado ningún cambio.
Según Margo Visitación, Analista de Forrester Research “La tecnología por sí misma no proporciona calidad, son unos procedimientos efectivos de pruebas y personal debidamente preparado los que hacen la diferencia. A menos que los responsables de desarrollo, de calidad y de operaciones estén de acuerdo con los procesos de pruebas, los limites organizativos quedarán difuminados y las responsabilidades no estarán claras.”
Las principales causas del bajo rendimiento en productividad se deben a que el 20% de las empresas reconocen que no disponen de procedimientos de calidad estandarizados, un 17% no dispone de unos recursos humanos debidamente formados en garantía de calidad, un 16% declara no disponer de procedimientos formales, y un 15% no vincula la satisfacción del usuario final de la aplicación a su calidad.
Por todo ello, Compuware planteó una solución denominada Compuware Application Reliability Solution (CARS), que proporciona un enfoque flexible para implantar procesos y prácticas estándares de calidad. CARS combina las herramientas de aseguramiento de calidad de Compuware y sus expertos, con una metodología de pruebas, QualityPoint, destinada a ayudar a las compañías a desarrollar sus propios estándares.