La certificación CMMI Nivel 2 aporta a Delaware una serie de ventajas competitivas, ya que es un requisito cada vez más exigido en pliegos de condiciones para proyectos de alto nivel, en sectores como Administración Pública, Banca o Telecomunicaciones. Concretamente, se aplica a su metodología de desarrollo de software, tanto en la parte modelos como en su aplicación práctica en diferentes proyectos.
El proceso de evaluación ha sido llevado a cabo durante un año por la consultora Sopra, y esta norma analiza el grado de madurez de los procesos de desarrollo de software desarrollado por SEI (Software Engineering Institute). CMMI permite además mejorar el alineamiento del software con la estrategia de negocio, reducir los costes y en las desviaciones en plazo de los proyectos de software, ofrece mayor eficacia en la detección de errores a lo largo del ciclo de vida de los proyectos de software, disminuye drásticamente el número de errores que afecta directamente a los clientes y usuarios, proporciona resultados más predecibles en los proyectos, y mejora el posicionamiento frente al mercado, entre otros beneficios.
“La certificación CMMI goza de un prestigio indiscutible en el mercado, ya que implica someter la metodología y práctica de desarrollo a un duro proceso de evaluación exhaustiva. Para Delaware lo más importante de esta certificación es poder trasladar al cliente todos los beneficios que ésta implica en cuanto a mejoras de calidad en los proyectos, beneficios que vamos a seguir ampliando, ya que estamos trabajando para la consecución de CMMI Nivel 3 en este año 2010”, comenta Luis Garma, presidente ejecutivo de Delaware.