El Gobierno chino está apostando decididamente por la inversión tecnológica como medida para aumentar su crecimiento y acercarse así a los grandes mercados internacionales. Así lo ha puesto de manifiesto en su XI Plan Quinquenal, con el que pretende convertirse en un referente tecnológico a través del impulso de sus redes de comunicación, ordenadores y satélites.
El Gobierno chino se ha comprometido a aumentar el gasto público en investigación y desarrollo hasta alcanzar el 2,5 por ciento del Producto Interior Bruto antes de 2020. Pekín también fomentará la exportación de bienes de alta tecnología que complemente las tradicionales manufacturas de bajo coste y mano de obra intensiva que en la actualidad suponen la mayoría de sus exportaciones.
“El modelo económico de crecimiento debe cambiar”, ha declarado Li Lianzhong, director de la Oficina Económica de Investigación del Comité Central del Partido Comunista de China. Para ello, el país asiático creará una red nacional de televisión digital y redes que posibiliten las comunicaciones móviles.
