El sistema de facturación electrónica continúa creciendo en nuestro país aunque de forma distinta, dependiendo de la comunidad autónoma y del tipo de empresa del que se trate.
En este sentido, datos facilitados por la compañía especializada en Soluciones Avanzadas de Comunicación entre empresas, Seres, fijan en un 3,5 por ciento el número de las empresas españolas que utilizan algún tipo de facturación digital. Igualmente, Seres indica como son Cataluña, Madrid y Valencia con el 43 por ciento del total- las comunidades que concentran un mayor número de facturas electrónicas emitidas, mientras que Extremadura y La Rioja, con un 2 por ciento del total, se sitúan a la cola en cuanto a la utilización de este tipo de documento electrónico.
La estructura del tejido empresarial parece ser la pauta principal que marca esta adhesión aunque sorprende, según Seres, que regiones como el País Vasco, con alta concentración empresarial, tan sólo generen el 4 por ciento del tráfico de e-facturas.
En lo que respecta al tipo de empresa, son las más pequeñas, las pymes, las más numerosas en la emisión de e-facturas en nuestro país, siendo las responsables del 88 por ciento del total del flujo de este tipo de documentos. Sin embargo, son las grandes empresas las que mueven un mayor volumen de negocio en emisión en este sector, con un 95 por ciento del total. La explicación de estos datos viene del hecho de que por cada diez empresas que emiten factura electrónica, sólo una la recibe. De este modo, las pymes son, en general, emisoras netas de facturas y las grandes empresas se convierten en las receptoras más idóneas. De hecho, son las grandes empresas las que suelen iniciar el proceso de modernización de los sistemas de facturación, favoreciendo así el paso al mundo de la factura electrónica a sus proveedores generalmente pymes.
Entre los principales receptores de e-factura en España, encontramos empresas como Grupo Carrefour, Coca Cola (Distribuidoras), Grupo Unigro (El Árbol) o Leroy Merlín, pertenecientes a la gran distribución, el sector con mayor peso en la facturación electrónica de nuestro país. Otras empresas como Danone, Nestlé o Heineken también impulsan la implantación de la facturación electrónica en España.
