Bull y Microsoft han dado un paso más en su estrecha relación de colaboración con el anuncio de un nuevo acuerdo a través del cual, sus clientes podrán beneficiarse de las ventajas que reporta ampliar la interoperabilidad entre los entornos de software de Microsoft y soluciones open source y Unix (en las que Bull opera, principalmente, en Europa).
En concreto, la colaboración incluye las áreas de: virtualización de las infraestructuras, para permitir el desarrollo optimizado de grandes plataformas Windows/Linux, teniendo en cuenta especialmente las necesidades del entorno de los alojamientos Web; aplicaciones críticas, para asegurar una mejor integración entre sistemas Unix y Linux y tecnologías de Microsoft, reduciendo el Coste Total de Propiedad (TCO); y, Extreme Computing, prestando especial atención a la necesidad de gestionar con eficacia clusters de Windows HPC/Linux.
Fruto de ello, Bull ha lanzado Cloud Maker, una oferta de cloud computing que utiliza el hipervisor Hyper-V de Microsoft bajo máquinas virtuales tanto de Linux, como de Windows. Según la compañía, esta solución permite a los usuarios adaptar el nivel de servicio a sus necesidades y monitorizar el funcionamiento de sus plataformas en tiempo real.