Dirigida por Francisco Leyva, esta nueva unidad es la responsable de la ejecución y coordinación de los principales programas de transformación tecnológica del banco a nivel global, asegurando el incremento de la productividad, actualización, seguridad y calidad del desarrollo de software. “Hasta la fecha, en el ámbito de Ingeniería habíamos avanzado en la creación de numerosas funciones globales (Infraestructura, Comunicaciones, Arquitectura), que dirigen y coordinan la ejecución de la estrategia con las unidades locales. La creciente relevancia del desarrollo de software reclama ese mismo nivel de globalización para aprovechar las ventajas de la globalidad”, destaca Leyva.
La estrategia de desarrollo digital por la que BBVA apostó hace ya varios años está contribuyendo a facilitar la gestión digital de las finanzas de los clientes. La implementación de las metodologías de trabajo ágiles, las prácticas DevOps -coordinación de diferentes equipos durante el desarrollo del ‘software’- y una perspectiva global, han sido clave para que las soluciones digitales aporten valor y sean escalables, tanto entre las unidades de negocio como entre países. Gracias a la apuesta de BBVA por la tecnología y estas formas de trabajar, el banco ha podido garantizar la calidad en el servicio, adaptar su forma de trabajar -con un 90% de la plantilla en remoto- y, a la vez, aumentar la capacidad de respuesta.
Entre personal interno y externo, más de 16.000 personas se dedican a diseñar, desarrollar o mantener el software en esta nueva unidad que persigue “conseguir una mayor reutilización de los componentes que construimos para entregar soluciones de forma más rápida y eficiente y, al mismo tiempo, desarrollan soluciones globales de más valor para nuestros clientes de lo que podríamos obtener en solitario en cada país”.
Para ello, la unidad se ha integrado en el área de Ingeniería de la entidad financiera incorporando entre sus reportes a los equipos de Diseño y Desarrollo en todos los países donde el Grupo tiene presencia, así como a los equipos de Desarrollo globales. Además, se han establecido codependencias con las unidades de Arquitectura de Soluciones Globales, Transformación de Desarrollo de Software y con BBVA Next Technologies, empresa del Grupo experta en ingeniería de software, y Veridas, compañía líder en tecnología biométrica creada por BBVA y das-Nano.
Globalizar soluciones para acelerar los tiempos
“Nuestro propósito implica ser capaces de entregar más y mejores soluciones a nuestros clientes en menos tiempo. Para ello hemos desarrollado un plan multianual que nos está ayudando a dar pasos firmes en la construcción de soluciones globales”, afirma Leyva. En BBVA ya existían plataformas de desarrollo globales, como GloMo, con más de 300 APIs globales que se reutilizan en las aplicaciones móviles del banco en cada país. “Lo que ahora buscamos es precisamente avanzar en la globalización de esos aplicativos”, explica.
El objetivo de esta nueva unidad de Desarrollo de Software es fundamentalmente la construcción de servicios que se puedan compartir en las ‘apps’ de todos los países y que además tengan un modelo de datos común. Algo que permite acortar los tiempos de ejecución apalancados en la escala que da tener a más de 1.300 desarrolladores para este proyecto en concreto en equipos de todo el mundo. “Acelerar la construcción de esos componentes comunes nos va a permitir desplegar servicios de manera global, sin tener que partir de cero en cada país. Globalizar estos componentes en todos los países nos llevaría ocho años en condiciones normales pero con estos avances queremos hacerlo en cuatro”, añade el directivo.
Poner a los desarrolladores en el centro
Con la transformación digital se han abierto nuevas formas de trabajo y las prácticas DevOps se han convertido en una guía en los entornos de desarrollo de ‘software’. Empresas como BBVA han implantado esta filosofía ágil que pretende abarcar toda la organización, más allá de los departamentos técnicos.
El desarrollo de software es una de las principales palancas de generación de valor para el negocio. La adopción de la nueva metodología de desarrollo llamada DevOps es primordial para transformar el proceso de desarrollo de software en BBVA por las numerosas ventajas que aporta a la función y a la estrategia del Grupo. “El uso masivo de DevOps nos está permitiendo optimizar el ciclo completo de desarrollo de software. No se trata solo de usar herramientas concretas, sino de cambiar la forma en la estábamos trabajando”, comenta.
Los beneficios de esta filosofía de trabajo ya se van materializando en prácticamente todas las dimensiones relevantes del desarrollo de software: productividad, calidad, tiempo de entrega, seguridad. En esta nueva etapa, las principales líneas de actuación de DevOps se centrarán en mejorar los procesos poniendo la experiencia del desarrollador en el centro con el objetivo de facilitar su trabajo, permitiéndole entregar más funcionalidad, de forma más rápida y que respondan mejor a las necesidades del negocio. “Estamos logrando software de mayor calidad, con menos errores gracias al ‘testing’ automático, y una mayor seguridad gracias a la incorporación de la ciberseguridad dentro del proceso. Todo ello acompañado de una reducción de costes, resultado directo del aumento de eficiencia del proceso”, asevera Leyva.
Claro ejemplo de esta mejora es patente en la web de BBVA España, que en un año y tras la implementación de la metodología DevOps ha pasado de 10 a 18 lanzamientos y de 500 a 2.700 historias de usuario, ejecutando más de 1.300 test automáticos que han permitido reducir al máximo el número de incidencias.