En el VII Congreso Nacional Vision12 de la asociación itSMF España, la eurodiputada y presidenta honorífica de esta asociación, Pilar del Castillo, ha afirmado que la adopción del cloud computing será una de las bazas fundamentales que deberá aprovechar España para retornar al crecimiento. Declara que la formación, la investigación y el desarrollo de las TIC, aprovechando especialmente el inmediato impacto y retorno de inversión que supone el cloud, son claves para potenciar el crecimiento y la competitividad de la economía española.
De hecho, el estudio “Cloud Computing. Retos y Oportunidades”, elaborado por el equipo de estudios del Observatorio Nacional de las Telecomunicaciones y la SI (Ontsi), del Ministerio de Industria, con la colaboración de Deloitte para Red.es, refrenda estas palabras de la eurodiputada. Según este informe, -cuyas conclusiones ya publicamos AQUÍ-, las soluciones de cloud computing disponibles en sus diferentes modalidades en el mercado (público, privado, híbrido, SaaS, IaaS, etc.), pueden resultar sumamente beneficiosas para la economía española. Así, a nivel macroeconómico el estudio desvela que por cada euro invertido el impacto generado en términos de PIB sería de 1,63 euros. En relación al impacto sobre el mantenimiento de empleo es muy elevado y puede alcanzar los 65.000 empleos en un año.
A juicio de Pilar del Castillo, mientras que la formación y la investigación podrán dar resultados a medio y largo plazo en asuntos tan transcendentales como la reducción del paro juvenil -muy por encima de la media europea-, una herramienta como la computación en la nube aporta un rápido e extraordinario valor añadido a las empresas y las administraciones públicas españolas en cuanto que facilita un entorno para desarrollar al máximo el aprovechamiento de las TIC en la gestión del negocio y poder así acelerar su competitividad gracias a la reducción de tiempos y de costes.
No obstante, se mostró crítica al demandar un mayor impulso por parte de las instituciones públicas españolas para favorecer este escenario. De hecho, contrastó su papel con la intensa actividad que desarrolla la Unión Europea en este campo para homogeneizar el uso del cloud “en un mercado único con 27 mercados nacionales y unos 500 millones de clientes potenciales” en cuanto a la legislación de aspectos como la seguridad de los datos, la interoperabilidad y portabilidad de los servicios prestados a través de este modelo y la clarificación de la “jungla de estándares” que existe actualmente.
