La incertidumbre política en España que genera la falta de gobierno y el consiguiente parón que eso produce en la inversión pública y de las principales empresas del país está repercutiendo negativamente en las ventas de PC. Y ya son cuatro trimestres consecutivos de caída. Según IDC, en el segundo trimestre del año las ventas de sistemas personales cayeron un 12,3%. En concreto se comercializaron entre abril y junio casi 716.000 máquinas, 100.000 menos que en el mismo periodo de 2015.
Por fabricantes, lideró con bastante claridad el ranking HP, que comercializó 228.144 equipos y cayó menos que el mercado (-2,6%). En cuota de mercado, HP acaparó un 29,1% del total. La gran sorpresa en el periodo la dio Asus, que desbancó a Lenovo de la segunda posición. En concreto, Asus comercializó 120.235 máquinas, un 60,1% más, según IDC, una consultora que mide las ventas del fabricante a su canal mayorista, pero no al usuario final. Mientras tanto, Lenovo cayó casi un 15% con respecto al segundo trimestre de 2015, para totalizar unas ventas de 111.081 equipos.
Por detrás se situaron Acer, que cayó un 30%, hasta las 87.739 máquinas, y Apple, que también cedió un 8,1% y logró poner en el mercado 50.838 equipos Mac. Llama la atención la significativa caída de Toshiba, que pasó de vender algo más de 66.000 portátiles en el segundo trimestre del año pasado a 11.104 en el mismo periodo del ejercicio actual. El retroceso es en gran parte debido a la decisión de la multinacional japonesa de retirarse definitivamente del mercado de consumo español.
“Nada en el contexto político está facilitando que el mercado funcione mejor en lo que llevamos de año. De hecho ahora estamos peor en España que en los principales mercados de Europa occidental”, comenta Pablo Ugarte, director de sistemas personales de HP. Además de la falta de Gobierno, también incide en la evolución negativa del PC en España el hecho que de que gran parte de la renovación del parque obsoleto de equipos haya acabado ya. “En el sector empresarial tampoco ha habido grandes volúmenes, aunque la pyme se ha comportado bien y las ventas no han cedido”, añade Ugarte.
Los datos de IDC reflejan una caída del PC profesional (el que se vende a empresas y administraciones) del 13,1%. En concreto, entre abril y junio se comercializaron algo más de 324.000 equipos de este tipo. En este apartado, HP lideró con un 36,8% de cuota, seguido por Lenovo, a 11 puntos de distancia.
En consumo, Asus se alzó por primera vez a la primera posición del ranking, con casi 100.000 máquinas comercializadas y un avance del 63,6%, superando a HP (-3,2%) y a Lenovo (-13,7%), que fueron segundo y tercero, respectivamente. La necesidad de ajustar inventarios pasó factura a Lenovo. Mientras tanto, la revelación, Asus, logró convertirse en la primera marca en el retail gracias a una buena rotación de producto y a la agresividad en precio mostrada por su equipo comercial. Acer también cayó un 29,1% entre abril y junio.
Por formatos, en el trimestre sufrió sobre todo el sobremesa. Las ventas de desktops se desplomaron un 21,1%, según IDC, hasta las 215.000 unidades. El fin de la renovación que propició Windows XP está detrás de esta caída. Por su parte, los notebooks cedieron un 7,8%, hasta superar ligeramente el medio millón de unidades. Otra vez, el parón del sector público y el retraso de algunos proyectos por la incertidumbre política estuvieron detrás de esta bajada.
Escenario complicado para el resto del año
Para Pablo Ugarte, no son buenas las perspectivas para el conjunto del año en el mercado español del PC. Ugarte dice que todavía el Gobierno entrante tendrá pendiente cumplir con las exigencias de déficit de Bruselas. Por esta razón, “en el sector público no habrá el pico de demanda habitual de finales de año”. “En educación, por ejemplo, no se repetirán los grandes deals (proyectos) del año pasado, como los de Extremadura y Andalucía”, añade. Por todo ello, y a pesar de que la demanda de las empresas se mantendrá, el directivo de HP cree que es probable que las ventas totales de sistemas personales caigan más de un 10% en el conjunto del año.