Adoptar la inteligencia artificial, sí, pero con prudencia. Esta es una de las principales conclusiones que se extraen del ‘CEO Outlook Pulse Survey’, un informe realizado a 1.200 consejeros delegados de todo el mundo por parte de EY en el que se posicionan acerca de la IA y de todo lo que conlleva su implantación en sus organizaciones.
El estudio también incluye aspectos como la asignación de capital, la inversión y las estrategias de transformación, además de los planes para incluir la sostenibilidad en la agenda de crecimiento.
Federico Linares, presidente de EY España, afirma que “en los últimos años estamos asistiendo a una verdadera explosión de la inteligencia artificial. El vertiginoso desarrollo de la IA Generativa desde finales de 2022 ha convulsionado el mundo tecnológico, económico y social. Estamos ante una gran oportunidad que supondrá una transformación en nuestras compañías, en sus negocios, productividad, atención al cliente y, sobre todo, la forma de trabajar. Pero también estos cambios implican riesgos, nueva regulación, etc. Es preciso abordar la IA desde una perspectiva tecnológica, pero también desde un firme planteamiento ético. Es ahora, antes de que sea tarde, cuando hay que poner las bases de una IA responsable y avanzada al servicio y al progreso de los humanos, de todos los humanos”.
Es preciso abordar la IA desde una perspectiva tecnológica, pero también desde un firme planteamiento ético
La explosión y el rápido avance de la IA generativa en 2023 han atraído la atención de líderes empresariales, inversores y consumidores. Las inversiones se cuentan en miles de millones de dólares, destinados a este tipo de herramientas y, especialmente, a su aplicación en el desarrollo de fármacos y software de vanguardia.
Los CEO tienen una visión clara de las enormes posibilidades que ofrece la IA y su capacidad para mejorar sus resultados. En concreto, el 65% está de acuerdo o parcialmente de acuerdo en que la IA representa una fuerza positiva que mejora la eficacia de las empresas lo que, a su vez, tiene un impacto positivo en la sociedad, como las mejoras en atención sanitaria.
Índice de temas
Implicaciones éticas de la IA
Dos tercios de los encuestados expresan su confianza en que la inteligencia artificial contrarrestará el impacto de la sustitución de la mano de obra humana al crear nuevas funciones y oportunidades profesionales.
Paralelamente, un 67% subraya la necesidad de que las empresas enfoquen sus esfuerzos en abordar las implicaciones éticas de la IA y consideren su impacto en aspectos fundamentales de la vida cotidiana, como la privacidad.
Un 64% de los CEO sostiene que aún no se están tomando medidas suficientes para anticipar y gestionar las consecuencias imprevistas de la IA
Además, un 64% sostiene que aún no se están tomando medidas suficientes para anticipar y gestionar las consecuencias imprevistas de la IA, las cuales podrían tener repercusiones significativas tanto en el ámbito empresarial como en la sociedad en su conjunto.
Respecto a abordar los riesgos sociales, éticos y delictivos ligados al nuevo futuro impulsado por esta tecnología, desde los ciberataques hasta la desinformación y deepfakes, el 65% de los participantes en el estudio afirma que es necesario dedicar mayores esfuerzos.
En este sentido, Federico Linares, sostiene que “el desarrollo de la inteligencia artificial es imparable y supone una gran oportunidad para el conjunto de la sociedad, pero es preciso abordar una tecnología tan poderosa y disruptiva desde un punto de vista humanista y sin perder de vista los aspectos regulatorios y morales. Numerosas voces autorizadas están reclamando un análisis sensato, justo y compartido que permita aprovechar todo el potencial de la IA sin dejar de abordar sus riesgos y, sobre todo, que no haga más grande la desigualdad social existente y usar todo su potencial para reducirla”.
Estrategias de inversión en IA
A pesar de estas preocupaciones, los CEO están diseñando estrategias de inversión para maximizar los beneficios actuales y futuros que la IA puede aportar a sus empresas y la asignación de capital ya se está centrando en estas nuevas tecnologías.
Un 43% de los dirigentes empresariales encuestados ha logrado integrar completamente los cambios de productos o servicios impulsados por la inteligencia artificial en su proceso de asignación de capital y está comprometido con la innovación de la mano de la IA.
Por otro lado, un 45% aún no ha realizado inversiones importantes hasta la fecha, pero tiene planes de hacerlo en los próximos 12 meses. En contraste, un 12% de las compañías no tiene previsto destinar un capital significativo a innovación de productos o servicios impulsados por la IA en el futuro cercano.