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Grupo Aitana, un enfoque al software de gestión en la pyme
Como relata Daniel Segarra, CEO de Grupo Aitana, Opentix comenzó en 2012 como un proyecto personal centrado en ofrecer servicios informáticos generales a clientes en Castellón. El cambio estratégico de OpenBravo hacia soluciones específicas para el sector retail llevó a Opentix a ampliar su enfoque hacia Sage. Esta transición coincidió con la adquisición de Aitana en 2017, una empresa ligada al hardware de IBM y en búsqueda de nuevas alternativas al entorno Microsoft. Hoy, Opentix y Aitana operan como entidades separadas bajo un mismo propietario, destacándose por su enfoque agnóstico hacia la oferta de productos para pymes y su compromiso con la especialización en ERP y tecnología de gestión empresarial.
Nos gusta diferenciarnos del típico partner porque no queremos ser simplemente concesionarios de Microsoft o Sage. Somos una compañía de tecnología enfocada en el software de gestión para las pymes, esa es nuestra definición concreta
DANIEL SEGARRA, GRUPO AITANA
¿Puedes remitirnos a los orígenes de tu empresa?
Inicialmente fundé una compañía que se llamó Opentix en 2012. Fue un proyecto personal, autónomo, sin empleados. Este proyecto comenzó ofreciendo mis servicios profesionales a los clientes que conocía en la zona de Castellón.
Con el tiempo, eso derivó en contratar gente y generar una pequeña estructura que, cuatro años después, llegó a contar con unas 28 personas, ya centradas en el mundo del ERP. Es decir, empecé con servicios informáticos generales, actuando como el informático de confianza para varias empresas, gestionando diversas necesidades, desde servidores hasta otros servicios.
¿Cómo fueron los primeros pasos?
En ese momento, trabajábamos con un producto llamado OpenBravo, que era de código abierto. Durante la crisis de 2011, muchas empresas utilizaban SAP, Microsoft, Sage, entre otros. Sin embargo, debido a la difícil situación económica, a muchas les resultaba complicado pagar los mantenimientos de esas soluciones. Esto generó un nicho para varios productos gratuitos, semigratuitos o de código abierto.
El software de código abierto funcionó bastante bien como sustituto de otras herramientas como Microsoft y Sage, aunque no pudo reemplazar a SAP, que está dirigido a empresas mucho más grandes. Sin embargo, en el sector de las pymes, tuvo un gran éxito en esos años. Como resultado, Opentix pasó de ser una empresa desconocida en 2016 a convertirse en uno de los principales socios de OpenBravo, llegando a ser Gold Partner y uno de los socios más importantes a nivel mundial.
¿Qué fue de OpenBravo?
La compañía cambió de rumbo en su estrategia como fabricante de software. De ser un ERP de código abierto con una red de partners que lo implementábamos principalmente, pasó a enfocarse en un producto muy específico para el sector retail, especialmente en la cadena de distribución y puntos de venta. Este cambio hacia clientes más grandes nos llevó a repensar nuestra estrategia en Opentix, y decidimos abrir la puerta a Sage.
Fue en este contexto que conocimos a Aitana, ligada al hardware de IBM y que estaba buscando una alternativa al mundo de Microsoft. En 2017 se produjo la adquisición de Aitana por parte de Opentix.
¿Cuál es la relación actual entre Opentix y Aitana?
Tenemos dos grupos diferenciados por la tecnología: Aitana, que es un Gold Partner de Microsoft y Opentix, Platinum Partner de SAGE Desde entonces, hemos operado con estos dos grupos: el área de Sage bajo el paraguas de Opentix y todo lo relacionado con Microsoft bajo el paraguas de Aitana, lo cual es bastante habitual, ya que son dos fabricantes competidores.
Nos gusta tener múltiples marcas porque estratificamos nuestra oferta según el cliente, su tamaño o el sector en el que opera. Ofrecemos soluciones diversas y bien diferenciadas. Por ejemplo, tenemos productos muy pequeños para autónomos y también manejamos grandes proyectos, como los que realizamos para Burger King Spain o para empresas israelíes.
¿Cómo os gusta diferenciaros, como consultora o como partner?
Nos gusta diferenciarnos del típico partner porque no queremos ser simplemente concesionarios de Microsoft o Sage. Somos una compañía de tecnología enfocada en el software de gestión para las pymes, esa es nuestra definición concreta. No pretendemos ser especialistas en ciberseguridad, infraestructuras u otras tecnologías que también podrían formar parte de nuestra oferta.
En ese contexto, buscamos compañías que aporten valor a las pymes con productos o servicios complementarios a nuestro software de contabilidad, compras, ventas y almacenes, el software core de la compañía. Todo debe estar relacionado con la gestión empresarial.
¿Qué diferencia tu empresa de la competencia?
Intentamos ser agnósticos dentro de lo que es la oferta de productos para la pyme. Siempre estamos atentos a las acciones que toman los fabricantes para poder ofrecer a nuestros clientes lo que mejor se ajuste a sus necesidades. Por eso tenemos dos marcas y, dentro de estas marcas, somos partners de varios productos.
En Sage, por ejemplo, abarcamos desde X3, que es un producto para medianas o grandes empresas, hasta Sage 50, que es ideal para la primera etapa de una empresa. También trabajamos con despacho profesional, que es un área muy específica. Buscamos diferenciarnos siendo especialistas en ERP.
¿Planteáis introduciros en tecnologías disruptivas como blockchain o inteligencia artificial?
Nosotros somos bastante pragmáticos en ese sentido. No introducimos todo de golpe a clientes ya consolidados. En términos tecnológicos, no nos consideramos early adopters; más bien, somos conservadores. Esto se debe a que trabajamos directamente con el núcleo del negocio del cliente. Nos aseguramos de que el cliente avance de manera segura hacia la digitalización, un camino en el que llevamos involucrados 30 años.
¿Le da miedo la nube a tus clientes?
Ahora son más receptivos desde la pandemia. Hubo un cambio muy significativo en la adopción del cloud. Actualmente, todo se orienta hacia el cloud; sin embargo, en el caso de las pymes, especialmente las más pequeñas, han mostrado siempre más reticencia. Les cuesta más, ya que a menudo están hablando de un número reducido de puestos de trabajo. La ventaja del cloud se centra en la seguridad y otros aspectos locales. Los costos asociados para las pymes son considerablemente más altos en comparación con las grandes empresas cuando se trata de la nube.
¿Y el tema de formación? ¿Hacéis algún tipo de formación con vuestros clientes?
Es parte fundamental de lo que hacemos porque siempre estamos conscientes de que, aunque un cliente trabaje con un mismo fabricante durante muchos años, la tecnología cambia constantemente, junto con los productos. Además, se introducen leyes y normativas nuevas, como el Suministro Inmediato de Información (SII), que implican nuevos procesos. Por eso, la formación es un componente fundamental del servicio que ofrecemos al cliente, así como del soporte posventa.
¿Vais a mantener vuestra estrategia de cara al futuro?
A nosotros nos interesa más tener como cliente a 300 panaderías Manolo que a un banco del IBEX35. Precisamente porque, creo yo, son pocas las empresas que identifican ese segmento de mercado como un nicho viable, dado que históricamente no había capacidad de inversión en él. Estas empresas estaban cómodas como estaban y más allá de emitir facturas, no iban más allá.
Pero hoy en día, con las normativas vigentes y la accesibilidad al software, la situación ha cambiado. Los clientes han evolucionado tecnológicamente; todos llevan un smartphone en el bolsillo, cuando antes tener un móvil era algo raro. Estos factores hacen que ahora este segmento de mercado sea mucho más atractivo. En cuanto a previsiones de negocio de mi compañía, esperamos alcanzar los 40 millones de facturación en 2024.