entrevista

Alfred Escala, Cloud Platform Leader de IBM SPGI: “Nuestro ADN está en las cargas de negocio críticas”



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IBM tiene ya consolidada su región cloud en Madrid, la tercera de la UE, que ha tenido como principal reactivo la expansión de servicios al cloud de su gran cliente, CaixaBank

Artículo publicado el 3 jul 2023

Rufino Contreras

Redactor Jefe



alfred escala
Alfred Escala

¿Por qué razones IBM anunció su región Cloud en España?

IBM cuenta en la actualidad con 10 Multiple Zhone Regions (con una topología en tres CPD conectados entre sí, conectados a dos puntos de acceso a la red) en el mundo, dos en EEUU (Dallas y Washington), uno en Toronto y otro en Sao Paulo. En Europa tenemos en Frankfurt, Londres y París (exclusivo para BNP Paribas). Y después tenemos dos en Japón (Osaka y Tokio) y Australia (Sidney). Debido al Brexit, en la UE nos quedamos con uno público y otro privado, y el consejo de IBM decidió abrir un nuevo centro. Tras un análisis de mercado, se decidió abrirlo en España por varios motivos: un país donde los CPD están en auge debido a su capacidad de conexión, por una parte, tienes el Sur de Europa y por otra el Norte de África, así como línea directa con Latinoamérica. Es por tanto un sitio estratégico donde se está viendo mucha inversión en estas infraestructuras. Otro motivo de decisión fue el negocio de IBM en España, especialmente por nuestra posición en banca y seguros.

Tenemos aquí una cuota grande de mercado en estos sectores mayor que en otros países del Viejo Continente. La decisión se tomó en mayo de 2021 y se hizo pública en septiembre del mismo año. Otro factor decisivo fue su cliente clave CaixaBank, al que había que seguir ampliando servicios tecnológicos. (Independientemente de las regiones cloud, el gigante azul cuenta con otros centros de datos autónomos y el total desplegado asciende a los 60).

¿En Europa se aplica una diferente política de sus regiones cloud, por aquello de que la UE se muestra generalmente más estricta que el resto de los continentes?

Por supuesto. Tenemos que ser cien por cien compliance, no solo con la normativa europea. Tenemos un vertical de cloud específico para banca con servicios que ya contemplan embebidos todos esos aspectos para que cumplan con los requerimientos legales del regulador. Partimos de la normativa NIST de EEUU y se hace una adecuación específica a la normativa de la EU. La plataforma cuenta con seguridad y controles integrados para permitir que las instituciones financieras automaticen su estado de seguridad y conformidad y que los clientes puedan simplificar su gestión de riesgos y demostrar la conformidad con la normativa. Tenemos un foco específico para garantizar que somos compliance con toda la normativa europea.

¿La escisión con Kyndryl cómo cambió la estrategia cloud de la compañía?

Más que llevar servicios a la nube, Kyndryl comercializa los servicios de infraestructura como parte de las opciones de outsourcing que provee a sus clientes, y eso se sigue manteniendo. Esta segregación nos abre oportunidades tanto a ellos como a nosotros. De hecho, Kyndryl es nuestro primer cliente y nuestro primer proveedor, y con ellos tenemos nuestros grandes proyectos, como es el de CaixaBank, a través de ITnow, empresa que presidí años atrás. Aparte de esto, Kyndryl tiene la opción de trabajar con otros hiperescalares y nosotros tenemos la posibilidad de asociarnos con otros proveedores de infraestructura.

¿Y cómo mantienen la autonomía en el capítulo de infraestructuras?

Kyndryl, como proveedor de infraestructuras, tenía sus propios CPD, si yo contrato con ellos, me prestan servicios desde centros que tienen alquilados en Alcalá de Henares y Torrejón de Ardoz. Esto siempre ha sido una red distinta de la red de IBM Cloud. Cuando se produce el spinoff, no hay ningún problema, porque la infraestructura de dar servicios cloud ya estaba verticalizada con IBM (Managed Infrastructure Services) y la infraestructura para servicios outsourcing estaba verticalizada bajo Global Technology Services, que pasó a ser Kyndryl.

Háblenos de CaixaBank, el gran disparador de esta región cloud.

CaixaBank contaba con un centro de datos alquilado en la Diagonal de Barcelona y después contrató otro en Xan Cugat, y lo sustituyeron por uno de construcción propia en Cerdanyola del Vallés (más tarde construyeron un segundo). A efectos de legislación y resiliencia, CaixaBank se vio en la necesidad de tener un tercer centro fuera de Cataluña con la función de disaster recovery. Comenzaron las negociaciones en torno al cloud y entendieron que no tenía mucho sentido volver a invertir, y a cambio iniciar un proceso de Journey to Cloud. Entonces decidieron trasladar parte de sus cargas al CPD de Madrid.

CaixaBank es un gran avanzado en tecnología…

Yo he llevado la cuenta de CaixaBank unos nueve años; fue la primera entidad financiera en Europa que puso ordenadores personales en las oficinas (los legendarios PS/2) y es un cliene intensivo de toda la infraestructura mainframe de IBM. En 2011, IBM y La Caixa (como se denominaba por entonces) suscribieron un acuerdo para constituir la citada ITnow, una empresa conjunta de Kyndryl, tiene el 49%, y el banco, con el 51%, y es el operador de todas las infraestructuras del grupo financiero. En 2012 cerramos con ellos la creación de un centro de innovación donde ambas compañías aportan fondos para proyectos innovadores. Nos metimos en temas de inteligencia artificial en 2013, bastante antes de ChatGPT, con un proyecto de Comercio Exterior, de tal forma que en las oficinas se podían consultar dudas de este tipo: ¿cómo hago un crédito a la exportación a Senegal? Y el sistema Watson le daba la respuesta pertinente. Este proceso sigue vigente y estamos en otros proyectos disruptivos relacionados con blockchain; también nos estamos sumergiendo en el ámbito de la tecnología cuántica. La idea final es transformar todas las infraestructuras de sistemas distribuidos de CaixaBank a un entorno de nube.

¿Están abiertos a otros clientes?

Por supuesto, CaixaBank es el ‘anchor client’, pero contamos con otros muchos, especialmente en el sector financiero. Tenemos un acuerdo con RSI para incorporarse a la región, donde tenemos del orden de 700 clientes que se atienden ahora desde otras regiones y el plan es trasladarlos hacia aquí. Nuestro foco es industria regulada, hablamos de banca, seguros y sector público.

Una duda que me suscita es que cuando se habla de nube pública todas las miradas apuntan a Microsoft, AWS y Google (y en menor medida a Oracle). ¿IBM dónde se encuentra dentro de este espectro?

El concepto que tiene IBM es que tú vas a ser capaz de utilizar los recursos de computación y almacenamiento de red en distintas ubicaciones: hablamos de ‘hybrid cloud’. En función del tipo de carga, de la seguridad que necesite esa carga, de las inversiones que has hecho, de la confidencialidad que requieran los datos, de la latencia de las aplicaciones… vas a poder decidir dónde se ejecutan esas cargas. Al cliente le decimos que hay cargas que posiblemente tengan que ejecutar en on premise, porque tiene inversiones de legacy que no tiene amortizadas. En sanidad, por ejemplo, por mucho que le garantices que el dato no va a salir de su coto privado, muchos centros se resisten y prefieren manejarlo dentro de sus instalaciones. Hay otras cargas que pueden hacerse off premise en una nube pública, que puede ser la nube pública de IBM con una serie de ventajas, o las de los hiperescalares. Nuestra solución de cloud distribuido Satellite te facilita que puedas disfrutar y usar los servicios de nube ya sea en on premise, en la cloud de IBM o incluso en AWS, Azure, Alibaba, u otro hiperescalar. Lo único que necesitas es dar de alta un servidor Linux en esas ubicaciones y nosotros desplegamos nuestros servicios cloud, ya sean de contenedores, inteligencia artificial, etc.

¿Qué ventajas ofrece la solución Satellite de su compañía?

Es una pérdida de tiempo empezar a mover datos de arriba hacia abajo. Si necesito procesar un volumen ingente de datos que tengo on prem, los tengo que subir a la nube para que alguien los procese, para volver a bajar el resultado. Un sistema ineficiente tanto en rentabilidad como en sostenibilidad. Nosotros seguimos teniendo los datos en on prem, donde los hemos recogido, y lo que bajamos es el proceso de cloud. El ADN de IBM está en las cargas de negocio críticas: resiliencia, cumplimiento normativo, seguridad, escalabilidad, latencia.

¿Es competitiva IBM en términos de precio con relación a los hiperescalares?

En los hiperescalares el coste de comunicación y movimiento de datos es altísimo y a los clientes se les ha disparado. Muchas veces el almacenamiento de las empresas a la nube es muy barato, pero moverlo para que valga resulta muy caro. En nuestro caso, el coste dentro de nuestra red es gratuito, y el cliente paga solo por la entrada o salida. Algo beneficioso para el TCO de las empresas. Hay costes ocultos en el mundo del cloud, lo que intentamos es transparentar y eliminar todos esos gastos imprevistos.

Una inversión millonaria

Hace dos años, IBM anunció la activación de una nueva región cloud en Europa, concretamente en Madrid. Una región articulada por tres centros de datos soportados por los operadores Digital Realty (Madrid), NTT (Las Rozas) y Data4 (Alcobendas), los tres grandes de este mercado. Cada uno de ellos constituye una zona de disponibilidad. Esto está diseñado para que, si ocurre una incidencia, solo se vea afectado uno de los centros de datos, en lugar de los tres, lo que permite dotar de servicios en la nube consistentes y con una mayor capacidad para recuperarse. Los clientes que alojan cargas de trabajo en este tipo de infraestructura de IBM en cualquier país pueden ejecutar continuamente cargas de trabajo de misión crítica en todo momento para mantener el negocio en funcionamiento. En el caso de Digital Realty (la antigua Interxion), este proyecto ha llevado consigo la construcción de un nuevo centro, el MAD4, que ha supuesto toda una revolución en ingeniería en materia de CPD. Con una superficie de 35.000 metros cuadrados, cuenta en su primera fase de construcción (la que ha sido reservada para IBM) con una potencia de 5 megawatios y cuando esté terminado el edificio, alcanzará los 30 MW. Un centro diseñado bajo las premisas de la sostenibilidad. La inversión total es de 230 millones de euros. Computing ha tenido la oportunidad de visitar las instalaciones y ha podido constatar lo avanzado del diseño y la modularidad con la que ha sido concebido. En principio, la sala de IBM dentro tendrá 700 metros cuadrados, ampliables a 1.400.

Para Digital Realty, el contrato con IBM (que contempla tanto proceso como punto de acceso), supuso el reactivo para la construcción de este innovador edificio situado en el corazón del Silicon Alley madrileño. “Con el compromiso adoptado con IBM tuvimos que adelantar la construcción, se ha finalizado el 50% del mismo. Ha sido un proceso largo, y solo nos falta pulir algunos aspectos”, explica Javier Montemayor, director de operaciones de Digital Realty en España. Según el responsable del centro, “la combinación de las últimas tecnologías de los fabricantes de infraestructuras está aplicada. La principal diferencia empieza en la calidad de servicio que se entrega de energía por alta tensión. Aquí empezamos con un factor de eficiencia energética de un 8%. También podemos hablar de diferentes configuraciones internas, pero sobre todo con el menor consumo de agua posible. Nuestro sistema mecánico de refrigeración está pensado con condensadores vía agua con compresores de aireación magnética, que nos permite ser más eficientes energéticamente un 20%”.

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