Cisco: Informe Global de Amenazas

Cisco acaba de hacer públicos los datos del informe de seguridad correspondiente al primer trimestre de 2011. En esta investigación se puede apreciar que el malware ha continuado creciendo en la Red, dado que las empresas se han topado con una media de 274 infecciones web mensuales durante este periodo, lo que supone un crecimiento del 103% frente al año 2010.
A pesar de esta evolución al alza, el nivel de peligrosidad del malware por ataque ha disminuido, lo que significa que “aunque el número total de ataques aumenta, las infecciones están enfocando su actividad a largo plazo en lugar de tener un efecto más inmediato”,explica Pilar Santamaría, directora de Desarrollo de Negocio y Ciberseguridad para la Región Mediterránea de Cisco.
Otro de los aspectos que se evidencian de esta investigación es que el número de infecciones a través de webmail (correo basado en la web) continua creciendo exponencialmente, pasando del 1% registrado en enero hasta el 7% del mes de marzo; unos ratios que indican que está experimentando un ritmo de crecimiento cercano al 400%. Los sitios de webmail más afectados han sido Yahoo! (45%), Windows Live/Hotmail (25%), AOL (3%) y Gmail (2%). No obstante, como apunta Cisco, al igual que sucede con los buscadores, el número de infecciones está más relacionado con la popularidad del servicio que con un mayor riesgo específico de la plataforma.
En cuanto al apartado de búsquedas en Internet, estas han acumulado el 9% del total de infecciones web en el período analizado, con una media del 33% en Google y del 4% en Yahoo! y Bing.
Por sectores, los segmentos de la industria química y farmacéutica y de energía y petróleo han sido los más expuestos a las infecciones web durante el primer trimestre del año, con un ratio de riesgo que se sitúa en el 360% y 320%, respectivamente. Los mercados de agricultura y minería (210%), transportes y logística (190%) y educación (180%) son los siguientes más expuestos según esta clasificación, mientras las compañías de negocios inmobiliarios y aviación corren el menor riesgo.