Fundada por la Real Sociedad Económica Aragonesa de Amigos del País, la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja, que opera bajo la enseña comercial Ibercaja, inició sus actividades en 1876 y constituye un claro ejemplo de la apuesta de las cajas de ahorros españolas por la innovación tecnológica. No en vano, la caja que preside Amado Franco forma parte del grupo de pioneras en España en instalar el teleproceso hace ya 40 años. “Siempre de la mano de las necesidades del negocio, hemos estado en la primera línea de la evolución”, afirma el director de Tecnología y Sistemas, y subdirector general de Ibercaja, José Luis Lázaro.
La decidida apuesta por la innovación de Ibercaja, que obtuvo en 2007 un beneficio individualizado de 40,81 millones de euros, forma parte del esfuerzo realizado por la caja de ahorros para responder al profundo proceso de diversificación que el sector financiero viene experimentado en los últimos tiempos, cumpliendo al mismo tiempo con el imperativo de ofrecer una atención multicanal para cubrir las necesidades de los clientes.
En esa línea, Ibercaja dio el salto a mediados de los años 90 al mundo de los sistemas abiertos y ha incorporado la externalización a su estrategia TIC. “En los últimos 12 años”, explica Lázaro, “hemos pasado de ser prácticamente autosuficientes con nuestro personal interno, a trabajar con un amplio abanico de empresas externas, configurando un modelo imprescindible para ofrecer los tiempos de respuesta adecuados al desarrollo de la actividad y cumplir la multitud de regulaciones que nos afectan”.
Ibercaja pertenece a la Confederación Española de Cajas de Ahorros (CECA) y ocupa la duodécima plaza en el sistema financiero español y la sexta entre las cajas ahorros, por recursos de clientes e inversión crediticia, además de ser la tercera caja en fondos de inversión y la cuarta en fondos de pensiones. El directivo destaca, en este punto, “la iniciativa conjunta de las cajas de conectarnos on line y proyectos como SICA-on-line o la creación del Sistema 6000 para medios pago, con los que nos anticipamos muchos años a lo que ofrecía el mercado y el entorno tecnológico”.
Esa filosofía de anticipación ha llevado a Ibercaja a integrar en su entorno de servicios on line la plataforma ASF (Advanced Signature Framework) de TB Soluciones, posibilitando la autenticación de los clientes mediante el e-DNI en el uso de Ibercaja Directo y abriendo la puerta a la utilización de certificados digitales de uso reconocido como elemento de identificación.
Impulso a Ibercaja Directo
Con este proyecto, Ibercaja gana posiciones en el innovador mercado de la banca electrónica, un mundo en el que la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja empezó a competir de forma temprana.
Describir la evolución de Ibercaja en el mundo on line obliga a remontarse a mediados de la década de los 90 y los tiempos del videotex, momento en el que la caja decidió establecer el primer canal de un Servicio Financiero a Distancia. “El ordenador estaba tomando carta de naturaleza y entendimos que este era el camino para montar nuestro primer servicio on line para clientes”, recuerda Lázaro.
Con ese objetivo, Ibercaja empezó a trabajar en tres frentes: un software para instalar en los PCs de los clientes, un entorno servidor que actuara como frontal del servicio y la reducción del coste de las comunicaciones. “Los dos primeros asuntos”, comenta el directivo, “los resolvimos incorporando la solución que nos ofrecía Intercomputer junto con servidores VAX de Digital; mientras que el coste de las comunicaciones sólo pudimos suavizarlo instalando concentradores provinciales, de manera que la mayoría de los clientes pudieran conectarse afrontando únicamente costes de llamada local o provincial”.
Lógicamente, la infraestructura de comunicaciones de Ibercaja ha evolucionado desde entonces y, a día de hoy, la caja, que tiene como proveedor en este campo prácticamente en exclusiva a Telefónica, apoya sus comunicaciones en el servicio MacroLAN de la operadora en el caso de sus centros singulares, en tanto que la conexión con las 1.083 oficinas que conforman su red se basa en ADSL.
Por su parte, las comunicaciones entre los dos CPDs en configuración activo/activo de Ibercaja se apoyan en equipos DWDM conectados por fibra óptica que se encargan de garantizar el tráfico y la replicación de datos.
En cuanto a la infraestructura TIC de Ibercaja, hay que distinguir en primer lugar, los sistemas centrales, soportados por equipos de Fujitsu, concretamente del modelo mainframe GS21/600, recursos de almacenamiento Eternus y la tecnología CentricStor de virtualización del mismo proveedor. El amplio entorno central de sistemas abiertos y distribuidos de Ibercaja se levanta en servidores y cabinas de almacenamiento EVA de HP.
A nivel de aplicativos, el core financiero de Ibercaja consiste en un desarrollo propio en host sobre AIM de Fujitsu, mientras que el terminal financiero se trata de una plataforma propia denominada Arco y que está desarrollada sobre .Net utilizando la herramienta TPNET de Fujitsu y soportada en PCs Windows XP.
Lógicamente, la apuesta de Ibercaja por los sistemas abiertos también alcanza a su entorno de banca electrónica. En 1998 la Caja de Ahorros y Monte de Piedad de Zaragoza, Aragón y Rioja estableció su primer servicio de banca electrónica basada en web sobre equipos Alpha-Digital. Y, desde 2001, una nueva plataforma Windows-Intel y un nuevo desarrollo denominado Ibercaja Directo presta este servicio, que ha pasado a ser fundamental en la atención de las necesidades de sus clientes. “Por este canal actualmente atendemos más de la tercera parte de las transacciones de nuestros clientes; tenemos 200.000 usuarios habituales y en los momentos de máxima actividad se alcanzan las 30 transacciones por segundo en este canal, que ofrece una completísima gama de operaciones e informaciones, tanto para particulares como para empresas”, destaca Lázaro.
En ese escenario y, concretamente, para el desarrollo de los procesos de identificación y autentificación Ibercaja tiene un sistema basado en usuario y clave, además de utilizar una palabra de firma adicional para las operaciones económicas. No obstante, en 2006 la caja incorporó como refuerzo para la firma el uso de una tarjeta de claves y, dando una nueva vuelta de tuerca, el pasado año la plataforma ASF del proveedor de TB Solutions. “Hemos incorporado la plataforma ASF para reforzar el proceso de identificación de los clientes y disponer de una herramienta potente en el entorno de certificación y firma digitales”, señala el directivo.
Autenticación con e-DNI
El primer objetivo de la iniciativa pasaba por permitir a los clientes interesados la utilización del DNI electrónico como elemento de autenticación en el uso de Ibercaja Directo, una funcionalidad que ya está disponible. Lázaro reconoce que, a día de hoy, “el impacto operativo es todavía muy reducido si pensamos en el ritmo de emisión del e-DNI y en el número de clientes de Ibercaja que cuenta con e-DNI e Ibercaja Directo y pueden, por tanto, beneficiarse del nuevo sistema”.
No obstante, el directivo hace hincapié en que “el proyecto en su conjunto tiene un alcance mucho mayor: la Ley de Impulso a la Sociedad de la Información, publicada el pasado 29 de diciembre, nos exige aceptar como elemento de identificación de clientes los certificados digitales de uso reconocido en España y ese es el siguiente paso que estamos abordando con la plataforma ASF, incluyendo la utilización de certificados propios”.
Además, la misma plataforma permitirá a Ibercaja desarrollar en su totalidad la firma digital. “Se trata de un proyecto de alcance y eso supone dar nuevos pasos, como pueden ser el uso de certificados internos o externos como los de la Fábrica Nacional de Moneda y Timbre”, apunta el directivo, para subrayar que “habrá un desarrollo de firma electrónica real a medio plazo y la Administración lo seguirá apoyando; nosotros estamos en esa línea y queremos transmitir a los clientes esa imagen de seguridad e innovación y apostar por nuevas tecnologías, amplias, sólidas y que nos inspiran confianza”.
Ibercaja se decantó por la plataforma ASF de TB Solutions después de analizar varias alternativas existentes en el mercado, considerando fundamentalmente tres grandes motivos: “la plataforma ASF de TB Solutions cumple con las expectativas y atiende las necesidades que hoy tenemos identificadas; tenemos un profundo conocimiento de la empresa puesto que ha desarrollado una parte de nuestro canal a distancia, en concreto el bloque de identificación; y, además, la trayectoria de TB Solutions nos da la confianza suficiente frente a futuros retos que puedan plantearse”.
El proyecto de integración de la plataforma ASF en Ibercaja que, de acuerdo con Lázaro, “se desarrolló puntualmente y sin retrasos sobre la planificación prevista”, es sólo uno de los muchos proyectos en los que está inmersa la caja en el marco de un Plan Estratégico totalmente alineado con el negocio. Entre las múltiples iniciativas recogidas en dicho Plan, Lázaro destaca: “el Plan de Continuidad de Negocio, para completar los procesos de réplica y respaldo de la totalidad de las actividades informáticas, incluidas las departamentales más específicas; completar la aplicación de terminal financiero Arco; la integración de una nueva aplicación de Comercio Exterior; y un Proyecto Integral de Riesgos y cumplimiento de las directrices de Basilea II”.