La Subdirección General de Innovación e Información Urbana del Ayuntamiento de Madrid trabaja desde hace muchos meses en el uso de la inteligencia artificial aplicada a la gestión urbana. Un claro ejemplo de ello son proyectos como el Prototipo Cibeles, que recurre a la IA y al lenguaje natural para facilitar en cuestión de segundos el acceso a la información urbanística.
José María Boyano Sánchez, Ingeniero de Caminos, Canales y Puertos y Subdirector General de Innovación e Información Urbana, y Jesús Cerezo Arillo, Arquitecto Jefe de Servicio de Integración de Procesos de la Subdirección, junto con Natalia Rodríguez Núñez-Milara, Ingeniera de Telecomunicaciones y CEO de Saturno Labs, la empresa encargada de su desarrollo, son los principales artífices de este prototipo que, desde que vio la luz en diciembre de 2019, ha participado en importantes citas de innovación para la Administración Pública, como el VI Congreso Ciudades Inteligentes o AWS Initiate España Online 2021.
El germen del Prototipo Cibeles se plantó hace unos dos años, cuando desde el consistorio de la capital comenzaron a plantear la posibilidad de que, igual que ocurría con modelos como los de Alexa, se pudieran hacer preguntas por voz al callejero de Madrid; una forma de romper la brecha digital que existe en el acceso a este tipo de información tan especializada. Así, comenzaron a recabar información georreferenciada con toda la cartografía municipal y a aunarla en el Geoportal del Ayuntamiento de Madrid. “Ahora estamos empezando a crear un data lake y a ordenar los datos según sirvan para iniciar diferentes proyectos como, por ejemplo, de smart sities, desarrollo sostenible, etcétera”, cuentan desde el Ayuntamiento. “Vamos de lo particular a lo general”. El proyecto se ha desarrollado en tres meses y ha supuesto una reducción de los tiempos de consulta de un 80%.
El Ayuntamiento de Madrid ha introducido una skill propia en Alexa, la cual debe descargar cada ciudadano en su cuenta del altavoz inteligente
Una vez generado el servicio web de planeamiento que devuelva toda la información disponible y necesaria, se invoca el servicio con una única petición lanzada por voz a los altavoces inteligentes de Alexa, y acto seguido se obtienen, para una posición geográfica determinada, todos los parámetros urbanísticos que figuran almacenados en las bases de datos corporativas, accesibles a través de los distintos servicios de mapas, y toda la información previamente modelizada y almacenada en el Geoportal del Ayuntamiento de Madrid que sea necesaria en cada caso.
Uso accesible para todos Con ese servicio web en funcionamiento, se plantean dos cuestiones: qué y dónde. La intención de la pregunta (cuál es la información requerida y para qué posición dentro del término municipal) es básica. Para detectar las posibles intenciones dentro de la pregunta se crea una clasificación de la información que puede ser solicitada. A partir de ahí, y mediante el empleo de DialogFlow -una startup partner de Amazon Web Services y con tecnología Google-, se entrena al sistema para lograr un porcentaje mayor de acierto y corregir las desviaciones, obteniendo un slot de posibles intenciones. Igual de importante es determinar para qué posición exacta del territorio se demanda la información. Como punto de partida, se opta por el uso más común en la identificación: una calle y un número de edificio.
Una vez se ha recuperado toda la información, se almacena en memoria y comienza la interacción con el usuario. Se toma la decisión de fragmentar la información con el fin de conseguir interacciones más cortas, ofreciendo la posibilidad de acceder al resto de información disponible o de recibir toda la información mediante un correo electrónico, incluyendo enlaces a la documentación relativa de cada expediente administrativo que afectase a la posición objeto de consulta.
El Ayuntamiento de Madrid ha introducido una skill propia en Alexa, la cual cada ciudadano debe descargar en su cuenta del altavoz inteligente. Por su parte, toda la interacción con los servicios web municipales se resuelve con funciones ‘lambda serverless’ de Amazon Web Services. El uso de esta solución tecnológica, combinada entre DialogFlow y funciones lambda de AWS, ha permitido exportar la solución a Twitter generando un chatbot. De esta manera, se pueden enviar mensajes directos o menciones a la cuenta @InfoUrbanMadrid e iniciar así un diálogo con los mismos criterios que se usan para la interacción por voz, independientemente del sistema operativo, Apple como Android.
Desde el consistorio esperan que el proyecto pase a producción y contratación en un periodo de en torno a un año, “que a mediados de 2022 ya esté en manos del ciudadano”. El coste real del proyecto variará porque se basará en un modelo de pago por uso, pero “de momento cuenta con un presupuesto aproximado de unos 9.500-10.000 euros”.
Otros usos de la IA
La inteligencia artificial se emplea cada vez más en proyectos de la Administración Pública, en la que encuentra su implementación más útil en el servicio directo al ciudadano y la gestión de las ciudades. “Desde el análisis inteligente de fotografías tomadas por satélite para descubrir dónde existe amianto en los edificios y cómo retirarlo, hasta detectar en qué zonas de la ciudad se ha perdido masa arbórea por fenómenos como el temporal Filomena y replantarla. Las aplicaciones que, en concreto, el Ayuntamiento de Madrid le está dando a la IA son cada vez más numerosas”.