El rol del director de sistemas (CIO) ha brillado durante todo este periodo de Covid-19, durante la transición hacia el trabajo remoto. En general hay una percepción de que el director de Sistemas ha sido tras el director general el rol más clave para gestionar el primer golpe pandémico, incluso siendo responsable directo de amortiguar el impacto económico (nunca había habido una ocasión tan clara de demostrar por qué las tecnologías son para las organizaciones lo que es la sangre para el cuerpo humano, vital). Desde Penteo, en una de nuestras últimas investigaciones, ‘Estado del CIO’, repasamos y comparamos con otros años la figura del CIO, su liderazgo, su equipo y concluimos, como ya indicaban algunos indicios, que este efecto ‘héroe’ del rol del Jose Luís Pérez, Director de Análisis de Penteo director de Sistemas está empezando a quedar amortizado.
Decimos que la pandemia ha sido una ocasión magnífica para demostrar esto, que en general en el sector se viene asumiendo desde hace ya mucho tiempo, pero que quizá todavía en algunos comités de dirección no se tenía tan claro: la relevancia de las tecnologías para las organizaciones. Empiezan a ser bastante residuales las organizaciones que piensan que las tecnologías son un tema secundario, prácticamente la mitad de las empresas opinan que son, como mínimo, importantes y la otra mitad que son totalmente estratégicas. Si comparamos los datos de 2021 con los del año pasado 2022, podemos observar que se ha extendido un mayor nivel de formalización de la estrategia digital en la mayoría de las compañías. En 2021 había un 43% de organizaciones que declararon no tener ninguna estrategia definida, el resto de las empresas se repartían entre las que tenían esa definición a nivel parcial o limitados algunos aspectos, pero en cuanto a una definición a nivel corporativo pleno, en ningún caso se supera el 40% de las empresas.
Podemos concluir, pues, que la visión estratégica digital de las organizaciones durante el último año ha mejorado significativamente. Creemos que esto va a ir evolucionando positivamente durante los próximos periodos. En el informe publicado recientemente por Penteo también hemos analizado las competencias que los propios CIO identifican como claves para su función y podemos ver que se diferencian en tres grandes grupos de competencias:
• Competencias asociadas a la visión estratégica.
• Competencias asociadas al conocimiento de negocio.
• Competencias asociadas a la influencia organizativa.
En cuanto a la postura y posicionamiento que adopta el director de Sistemas en relación con la estrategia digital de su organización podemos observar una paulatina evolución hacia un rol de entre socio y líder.
En 2020, un 70% de CIO adoptaban a partes iguales prácticamente el rol de líder y de socio, en 2021 el rol de líder quedaba mucho más posicionado. Por el contrario, en 2022 prácticamente a partes iguales el rol más habitual es el de socio y el de líder, quedando muy residual el de consejero, el de simple apoyo y otro tipo de roles. Así, el CIO se ha consolidado como socio (en organizaciones donde el peso y empuje del CEO en la estrategia digital, es alto) y en líder en las organizaciones donde el mandato recae en el propio CIO y el CEO le da el apoyo y empoderamiento necesario para que pueda ejercer de líder. Así mismo, desde Penteo hemos analizado el posiciona miento del CIO dentro de la organización. Jerárquicamente, el CIO depende del director general. Esta ha sido la tendencia durante los últimos años y creemos que va a continuar siendo así. La dependencia del director financiero (un clásico en la historia de los CIO) va decreciendo paulatinamente en la misma medida que crece la de[1]pendencia del CEO, pero sigue siendo complicado eliminarla en muchas compañías.