El 80% de su facturación proviene ya de fuera de España y, como explica su CIO Vicente Jara, “sufrió los rigores de la crisis inmobiliaria, pero afortunadamente ya empezaba a desplegar su estrategia de expansión”. Royo tiene su fábrica principal en Quart de Poblet (Valencia) y otras dos en Polonia y México, así como una delegación comercial en Miami, que configuran sus principales emplazamientos. El grupo factura unos 75 millones de euros y tiene una plantilla de 750 personas. Su producción se centra en mobiliario y entorno auxiliar (grifería, accesorios, bañeras, platos de ducha, mamparas…).
A principios de este año, ha entrado en el accionariado de Royo un fondo de inversión estadounidense
Su principal cliente es el de las tiendas de sanitarios, y en segundo lugar está su canal ‘Do it yourself ’, que se dirige a grandes superficies del estilo de Leroy Merlin. En último término, está el OEM como marca blanca de grandes firmas como Roca. En estos momentos están estudiando dos nuevos canales: Contract (para hoteles y mobiliarias) y el online. “En esta primera aproximación al canal online, es Business to Business, pero estamos empezando a plantearnos si es el momento de atacar al cliente final y trabajar también el B2C, pero parece prematuro, ya que vamos a seguir mimando a nuestros distribuidores profesionales”, puntualiza el CIO de Royo. La firma implantó SAP hace un par de años. “Teníamos una herramienta de nicho original de la zona valenciana, basado en Oracle que nos fue bien durante muchos años, pero ante la estrategia de internacionalización y la necesidad de extender operaciones, vimos que se nos quedaba corto”, relata Jara. Se puso en marcha un proyecto para buscar herramientas alternativas y, finalmente, Royo se decantó por SAP R3, “fuimos pioneros; la primera empresa a nivel nacional en implantar R3 sobre SAP Hana. Hicimos una implantación bastante agresiva, porque en el plazo de un año desplegamos bastantes módulos, el BI (Business Warehouse con Business Objets) y también hicimos una implantación básica del SAP CRM”. Y ya recientemente, esta posición ventajosa, le ha permitido migrar a SAP R4 Finance. Razones del cambio Las razones del cambio vinieron dadas por la internacionalización y por un salto cualitativo en la hoja de ruta del grupo. “Teníamos un plan estratégico para pasar de 60 a 100 millones de euros de facturación en 2020. Lo revisamos al alza, y ya pensamos en rebasar los 200 millones”. Evidentemente, esto no se puede hacer a través de crecimiento orgánico sino que se van a basar en crecimiento inorgánico. A principios de este año, ha entrado en el accionariado de Royo un fondo de inversión estadounidense para ayudar a esa expansión internacional. “Estamos enfocando la estrategia a nivel europeo y estamos estudiando bastantes compañías para adquirir”, apostilla Jara. Antes de verano se cerrará la compra de una compañía, y de otra a finales de 2017. Buscan empresas de entre 15 y 100 millones de facturación. “Ahí es donde vemos la necesidad de una toma de control muy rápida de las empresas. Sabemos que no podemos imponer en un plazo breve de tiempo una arquitectura global de sistemas, una forma de operar y de logística, pero sí vamos a ser capaces en un espacio de tres meses de hacer una implantación de un core IT que ya hemos determinado: SAP S4 Finance; y va a ser el núcleo de las futuras filiales”, explica.
¿Por qué S4 Finance frente a su anterior R3?
“Hemos optado por S4 porque ofrece muchas mejoras a nivel de tesorería; la gestión de tesorería y de inversiones se convierte en un aspecto capital en nuestra estrategia de expansión”, argumenta Vicente Jara. “Un hecho común es que cada funcionalidad que ya existía en otros módulos tradicionales de SAP (logística, planificación o CRM) en los que se requerían servidores de bases de datos independientes, ahora la integran de una manera más homogénea en el transaccional principal financiero. Nos beneficiamos de esta ventaja también en consolidación y planificación, ya que consolidamos todas nuestras filiales con Business Intelligence lo que hasta ahora nos suponía cierres de unos 15 días. Ahora el cierre financiero se realiza en tres o cuatro días”, continúa. El directivo añade que “a nivel de exposición de información, hemos elegido la plataforma Business Object sobre Hana para todo el reporting. S4 Finance ofrece información visual y operativa con widgets; hay una mayor fusión entre los sistemas transaccionales clásicos con los sistemas de reporting y visualización”.
En resumen, “en Grupo Royo tenemos un pago por uso mensual para todo el stack. No tenemos administradores de sistemas para estas nuevas tecnologías”. Utiliza SAP Solutions Manager para gestionar las incidencias con varios niveles. “Tenemos un primer nivel interno en el que nuestros propios key users dan un soporte al resto de los usuarios del grupo. Hay un segundo nivel formado por el departamento de Procesos y Sistemas y en caso de no poder resolver la incidencia se escala al integrador con dicha herramienta y ellos lo resuelven”, explica el CIO de Royo. Todo este entramado les va a permitir tener un crecimiento rápido y un período de implantación corto con las nuevas filiales. Sobre una infraestructura virtualizada podrán desplegar la tecnología de una nueva oficina en 10 días. “Simplemente nos subirá la factura, el opex mensual”. El camino en el que están avanzando para todas las soluciones de SAP que tienen de la casa es ir incorporándolas a este modelo. Que ese datacenter vaya incorporando todos estos sistemas. Para el final del plan estratégico, el objetivo es que en todas las filiales solo dispongan de una infraestructura de comunicaciones basada en thin clients; “quien precise movilidad tendrá un portátil y toda la estructura de cómputo y almacenamiento va a estar en uno o varios cloud”, puntualiza. Los despliegues faraónicos de SAP van camino de reducirse, “hace dos años hicimos una implantación de un año si bien los proyectos de implantación de procesos de negocio siguen siendo laboriosos. La adopción de cualquier ERP no es un proyecto tecnológico sino de negocio y por mucho que mejore la tecnología para una empresa como la nuestra, hacerlo en menos de un año es muy complicado”, concluye Vicente Jara.
