En un giro inesperado, Amazon Web Services ha dado a conocer uno de los grandes lanzamientos de este año: una nueva apuesta para explorar los datos obtenidos por los satélites. Se llama AWS Ground Station, un nuevo servicio que “de forma más barata y eficiente” de acuerdo con su CEO, Andy Jassy, facilita la descarga de datos vía satélite en las 19 regiones en las que la compañía está presente a través de sus centros de datos, usando una red gestionada compuesta por doce antenas localizadas en todo el mundo.
Los clientes pueden recibir directamente los datos obtenidos por satélite en una de dichas estaciones, datos que podrán procesarse inmediatamente en Amazon Elastic Compute Cloud (Amazon EC2), almacenarla en Amazon Simple Storage Service (S3), y aplicar analítica avanzada y servicios de machine learning para ganar conocimiento, y emplear la red de AWS para mover la información a otras regiones.
De acuerdo con la compañía, en tan solo unos minutos es posible empezar a utilizar el servicio de Ground Station, ya que, a través de la consola es posible programar el acceso a los datos de la antena y poner en funcionamiento Amazon EC2 para comunicarse con el satélite. Los clientes pagarán por los minutos de acceso a la información de la antena utilizados.
Acuerdo estratégico con Lockheed Martin
Las firmas han anunciado un acuerdo estratégico para integrar el servicio Ground Station con la red de antenas de Lockheed Martin Verge. Con esta integración, los clientes que utilicen Ground Station multiplicarán las posibilidades de descarga de datos de múltiples satélites al mismo tiempo, pudiendo seguir descargando información, a pesar de posibles e inesperados fallos, como por ejemplo condiciones meteorológicas adversas que pudieran afectar parte de la red.