Impulsado por Fortinet y elaborado por Cybersecurity Insiders, el informe analiza las últimas tendencias, desafíos y estrategias de la seguridad cloud. El informe, que recoge las opiniones de más de 800 profesionales de la ciberseguridad de diferentes industrias y geografías, revela qué elementos impulsan la adopción de la nube híbrida y multicloud, los cambiantes desafíos a los que se enfrentan las organizaciones y los pasos a dar para proteger estos entornos dinámicos.
Entre las principales conclusiones del informe cabe destacar:
Índice de temas
Aumento de la inversión en seguridad cloud
El 63 % de las compañías planea aumentar sus presupuestos en los próximos 12 meses. En promedio, la seguridad en la nube representa actualmente el 35 % del gasto total en seguridad TI, lo que refleja la creciente importancia de proteger los entornos híbridos y multicloud. Las organizaciones deben evaluar sus estrategias de inversión en seguridad en la nube, en particular aquellas que tienen obligaciones de compromiso de gasto mínimo en la nube. Deben considerar programas de licencias de uso diario flexibles, lo que les permitirá aumentar o reducir rápidamente la escala, incorporar o eliminar la infraestructura según sea necesario y pagar solo por el uso real.
Crece la adopción de la nube híbrida
Según el informe, el 82 % de las organizaciones encuestadas aprovechan los entornos cloud para lograr una mayor escalabilidad, flexibilidad y resiliencia. Con ese fin, la adopción de la nube híbrida ha aumentado hasta el 54%, lo que permite a las organizaciones integrar sus sistemas locales con plataformas de nube pública.
El cumplimiento normativo frena la adopción cloud
Si bien la adopción de la nube ofrece beneficios sustanciales, también trae consigo desafíos de seguridad importantes, así el 61 % de los encuestados afirma que las preocupaciones de seguridad y cumplimiento normativo son las principales barreras para la adopción de la nube. Las configuraciones incorrectas, el incumplimiento de la regulación y las violaciones de datos se encuentran entre los problemas identificados más urgentes, especialmente a medida que se expanden los entornos híbridos y multicloud. Por ejemplo, los proveedores de atención médica que migran los registros de los pacientes a la nube deben cumplir con la regulación GDPR y, al mismo tiempo, proteger la información confidencial.
La carencia de personal impacta negativamente
El 76 % de las organizaciones confirmen que adolecen de falta de personal y de experiencia en seguridad en la nube. Lo que limita su capacidad para implementar y gestionar soluciones de seguridad integrales. Esta escasez subraya la necesidad de una formación y una mejora de las habilidades específicas para superar la brecha y replantear las estrategias de implementación en la nube para reducir la complejidad y aumentar la eficacia de la seguridad.
Falta de confianza en la detección de amenazas
Solo el 36 % de los encuestados expresó confianza en la capacidad de su organización para detectar y responder a las amenazas en sus entornos cloud. Esta falta de confianza resalta las vulnerabilidades de las arquitecturas actuales, especialmente en configuraciones híbridas y multicloud complejas.
Crear una postura de seguridad en la nube resiliente
El Informe sobre el estado de la seguridad cloud 2025 destaca la creciente complejidad de los entornos híbridos y multicloud actuales. Así como la necesidad urgente de estrategias proactivas para abordar sus desafíos.
Los pasos clave deberían ser:
- Adopción de plataformas unificadas para simplificar la gestión de políticas y garantizar la coherencia en todos los entornos.
- Invertir en formación para reducir la brecha de habilidades en ciberseguridad
- Aprovechar una plataforma CNAPP que combina herramientas avanzadas como protección de carga de trabajo, gestión de configuración, defensa en tiempo de ejecución para proteger contenedores y soluciones integradas para mejorar la detección de amenazas y remediar problemas.
- Uso de cifrado de extremo a extremo y remediación automatizada de riesgos para mejorar la protección de datos.
Además, las tendencias emergentes como la integración de la detección de amenazas impulsada por IA, el auge del Edge Computing y el interés cada vez mayor en las arquitecturas de confianza cero conformarán la próxima ola de soluciones de seguridad en la nube.