Jorge Herrero, Entelgy: “La IA aportará mayor calidad de vida en las ciudades”

En 10 años, al paso que evoluciona la tecnología, seremos testigos de los cambios en diferentes aspectos de la sociedad: la movilidad es uno de los que más lo experimentarán con la llegada y establecimiento de los coches autónomos o con la gestión más eficiente del transporte público, convirtiéndose así en una alternativa real para los ciudadanos y asegurando una movilidad sostenible

IA en las ciudades

Como enfatiza Jorge Herrero, Head of Technology & AI de Entelgy, la inteligencia artificial está transformando las ciudades modernas al mejorar la gestión del tráfico, transporte público, recursos energéticos y residuos, lo que las hace más inteligentes, sostenibles y eficientes. En los próximos 10 años, se prevé un aumento en la movilidad sostenible con coches autónomos y transporte público eficiente, además de ciudades con infraestructuras más seguras y una mayor participación ciudadana. La IA también reduce la congestión del tráfico mediante el análisis de datos en tiempo real y mejora la seguridad pública con vigilancia avanzada. Además, optimiza la gestión de residuos y el consumo energético, contribuyendo a una mejor calidad de vida en entornos urbanos más sostenibles.

¿Cómo está transformando la inteligencia artificial la gestión y operación de las ciudades modernas?

Es una realidad que la inteligencia artificial está transformando todos los ámbitos de la vida de las personas, incluyendo las propias ciudades. En este caso existen varios ejemplos como pueden ser la gestión del tráfico, del transporte público, de los recursos energéticos y de residuos. Todo ello encaminado a conseguir ciudades más inteligentes, sostenibles y eficientes.

¿Qué cambios fundamentales en la vida urbana se prevén para los próximos 10 años gracias a la IA?

En 10 años, al paso que evoluciona la tecnología, seremos testigos de los cambios en diferentes aspectos de la sociedad: la movilidad es uno de los que más lo experimentarán con la llegada y establecimiento de los coches autónomos o con la gestión más eficiente del transporte público, convirtiéndose así en una alternativa real para los ciudadanos y asegurando una movilidad sostenible. Pero no sólo esto, sino que las infraestructuras de las ciudades también serán más seguras, la participación ciudadana será cada vez mayor en la toma de algunas decisiones o incluso algunos proyectos podrán tener su gemelo digital para poder hacer simulaciones de diferentes escenarios y en base a eso decidir las mejor opción.

¿Cómo la IA puede ayudar a reducir la congestión del tráfico en grandes ciudades?

Una de las vías es a través del análisis de datos en tiempo real. Gracias a esto, la IA puede predecir patrones de atascos permitiendo a la administración pertinente tomar medidas para desviar el tráfico antes de que se produzcan, también ofrece la posibilidad de coordinar los semáforos para mantener un flujo constante de tráfico, así como controlar de manera eficiente los carriles reversibles y las vías rápidas, abriendo o cerrando carriles según la demanda del tráfico. Como podemos ver, la aplicación de la inteligencia artificial en términos de regulación de tráfico es muy variada y muy beneficiosa para el usuario.

¿Cómo mejoran las tecnologías de IA la seguridad pública a través de la vigilancia en tiempo real?

Las cámaras de seguridad potenciadas por esta tecnología podrían detectar comportamientos sospechosos mediante una vigilancia continua. Del mismo modo, la supervisión en busca de posibles peligros para la seguridad permitiría alertas oportunas y respuestas más rápidas de las autoridades en caso de ser necesario. No obstante, es importante tener en cuenta que según la reciente normativa en Inteligencia Artificial de la Unión Europea, se han prohibido ciertas aplicaciones que atentan contra los derechos de la ciudadanía, como los sistemas de categorización biométrica basados en características sensibles y la captura indiscriminada de imágenes faciales de internet o grabaciones de cámaras de vigilancia para crear bases de datos de reconocimiento facial.

¿Cómo pueden las ciudades equilibrar la necesidad de seguridad con la protección de la privacidad de los ciudadanos al implementar sistemas de IA?

Creo que es un escenario complicado y que aún queda mucho por probar y regular. Actualmente, como decíamos, la UE ha lanzado una nueva normativa para intentar regular el uso de esta tecnología para mejorar la seguridad de la ciudadanía y, esto es lo que actualmente debe primar a la hora de aplicarla.

¿Cómo está ayudando la IA a mejorar la eficiencia en la gestión de residuos y en la optimización del consumo energético?

La IA permite identificar y clasificar los restos con una precisión que oscila entre el 72,8 y el 99,95% de acuerdo a Springer Link. De este modo, los sistemas pueden trazar la calidad del material clasificado, determinar la composición de la bolsa de la basura o detectar atascos y problemas de rendimiento. Además, mediante sensores y cámaras inteligentes en los contenedores se puede controlar su capacidad, de forma que cuando un contenedor alcanza un determinado nivel, se envía una alerta a los equipos de recogida.

Por otro lado, la IA está también desempeñando un papel crucial en la transformación del alumbrado público mediante la optimización del consumo de energía. Algunas ciudades ya están equipando sus espacios públicos con lámparas inteligentes que pueden adaptarse a diferentes condiciones y necesidades, lo que además mejora la seguridad y la comodidad en las áreas urbanas.

¿Cuál es la visión ideal de una ciudad totalmente impulsada por IA, y cómo cree que afectará a la calidad de vida de sus habitantes?

Lo primero es pensar que la calidad de vida será mucho mayor por varios motivos. Uno de ellos es, tal y como decíamos antes, porque no tendríamos atascos, que es una de las causas de estrés que algunos ciudadanos experimentan cada día. Además, el número de accidentes se reduciría gracias al análisis de datos que realizaría la IA y que ayudaría a las autoridades a predecir horas, lugares, motivos por los que se producen y trabajar para prevenirlos. A nivel medioambiental también es realista pensar que la calidad de vida también mejoraría por lo que decíamos antes sobre la gestión de residuos, por la mayor apuesta por el transporte público ya que será más eficiente, por la optimización de los recursos energéticos como el agua y la luz. Además hay que sumar la construcción de edificios más inteligentes y la presencia de sensores en la ciudad que analicen diversos factores ambientales. Todo ello encaminado a una mayor sostenibilidad