La empresa de tecnología SolarWinds, protagonista de uno de los mayores incidentes de ciberespionaje en la historia, enfrenta ahora una demanda por parte de la Comisión de Bolsa y Valores de Estados Unidos (SEC). La demanda acusa a SolarWinds de fraude y falta de controles internos efectivos antes del ciberataque de 2020. Además, el director de seguridad de la información (CISO) de la compañía, Timothy Brown, también se encuentra nombrado en la demanda por ignorar advertencias sobre los riesgos cibernéticos.
Su CISO, Timothy Brown, también está incluido en la demanda por ignorar las advertencias sobre riesgos cibernéticos
El ataque Sunburst de 2020, que conmocionó a la comunidad de ciberseguridad, comprometió a clientes de SolarWinds, incluyendo agencias federales de EEUU, mediante un código malicioso en una actualización de software. La empresa de ciberseguridad FireEye fue la primera en detectar esta brecha, y Microsoft atribuyó el ataque a un grupo de estados-nación rusos conocido como Nobelium.
La demanda alega que SolarWinds y Brown engañaron a inversores sobre las prácticas de ciberseguridad de la empresa, creando una imagen falsa de su postura de seguridad. Documentos internos muestran preocupaciones expresadas por Brown sobre la seguridad de la empresa.
Los cargos de la SEC incluyen violaciones de disposiciones de informes y controles internos. SolarWinds ha negado las acusaciones y se compromete a luchar contra los cargos en los tribunales. La empresa expresa preocupaciones sobre las posibles implicaciones para la seguridad nacional y se compromete a aclarar la situación en los tribunales. El abogado de Brown también ha declarado su intención de defender su reputación en respuesta a la demanda de la SEC.
