El fundador de Corel, Michael Cowpland, ha finalizado sus actividades con la compañía de software canadiense, después de que lo anunciase ante la cúpula directiva el pasado 25 de enero. A pesar de su retirada, seguirá permaneciendo como segundo principal accionista con un 7 por ciento de las acciones, las cuales están valoradas en 20 millones de dólares, después de que Microsoft adquiriese el pasado mes de octubre títulos que alcanzan el valor de 135 millones de dólares.
Fuentes cercanas a Cowpland han declarado que él se encontraba descontento con algunas de las recientes decisiones de la compañía, incluyendo lo cambios en el logotipo y su retirada del espacio Linux, aunque éste ha negado todos estos comentarios y asegura que deja Corel para dedicar su tiempo a la empresa Zim Technologies International, con sede en Ottawa y, de la cual compró una parte minoritaria a principios de este mes.
Por otra parte, el abandono de la firma de Linux es uno de los factores que ha permitido que el departamento de justicia norteamericano empiece una nueva investigación de Microsoft para potenciales abusos de la ley antitrust.
