La incorporación de las Nuevas Tecnologías de la Información al mundo empresarial permiten redefinir los procesos de negocio alcanzando grados de eficacia y eficiencia inimaginables hace unos años. Descubrir estas posibilidades e implantarlas correctamente pueden llegar a proporcionar importantes ventajas competitivas a las compañías debido a la disminución de costes, reducción de riesgos operativos y la optimización de recursos humanos y tecnológicos, entre otros.
La demanda entorno a este tema está orientada principalmente a un enfoque estratégico que permita a una organización mejorar la calidad y seguridad de los servicios que proveen, gestionando dicha organización en términos de procesos, entendiéndolo como una secuencia de actividades orientadas a generar valor añadido desde una visión global, bajo un alto compromiso de servicio y mejora de la satisfacción del cliente y de los usuarios.
Para mantener y mejorar esta calidad, orientada al servicio del negocio, no es suficiente con medir los niveles de servicio. Las propias organizaciones de Sistemas de Información se ven en la obligación de estructurar su actividad en forma de procesos. Es necesario evolucionar a la gestión de IT basada en las mejores prácticas definidas en ITIL relacionándolas con otros marcos de referencia o estándares que han demostrado ser el modelo buscado. Las recomendaciones ITIL, por su parte, determinan los procesos que la mayoría de las organizaciones estiman como prioritarias para implantar y aportar valor a su negocio.
Artículo Grupo SIA: Plan Director de Gestión de Sistemas de Información
Pero ¿cómo convertiremos las decisiones tácticas en estratégicas? ¿cómo realizaremos el seguimiento y consecución de los objetivos planteados? En este punto tenemos que hablar del Plan Director de Gestión de Sistemas de Información (PDGSI), capaz de determinar cuál es el mejor camino a seguir para la implantación de procesos que permitan optimizar la actividad y ser eficientes en el servicio al negocio. Posee diferentes fases y recomendaciones, dependiendo de los objetivos y el estado de madurez de la organización.
El diseño del plan utiliza principalmente como modelos de referencia los siguientes estándares y mejores prácticas internacionalmente reconocidas: ITIL, CobiT (objetivos de control para las Tecnologías de la Información) e UNE-ISO/IEC 17799:2002 (norma que ofrece buenas prácticas para la gestión de la seguridad de la información en una organización), aunque puede reducirse a cualquiera de ellos.
La finalidad del PDGSI consiste fundamentalmente en evaluar la situación actual de una organización en cuanto a la calidad y seguridad de su gestión tecnológica y su posterior planificación de proyectos que le permita avanzar en ambos aspectos, gestionando, bajo el mismo enfoque, los activos tecnológicos y los procesos de negocio. Para ello, informa, mediante el uso de indicadores, cuál es el actual estado de cumplimiento de los distintos procesos que harán posible éste soporte al negocio sabiendo así en qué punto del camino se encuentra una compañía y cuánto le queda para conseguir esa alineación deseada. Además, el plan permite poner foco en aquellos aspectos de IT que están impactando más negativamente en el negocio o al menos no con toda la corrección que se espera, dando como resultado final una lista de proyectos recomendados, que deberán ser ejecutados para poder prestar con garantías un servicio eficiente en los términos que el negocio requiere.
Confirmado está, si la IT no evoluciona al concepto de proveedor de servicios de calidad hacia el negocio, éste terminará viéndose perjudicado.
