El Grupo Calvo se compone de varias empresas que se concentran en dos actividades principales: la pesca y la conserva. Empresa familiar en constante crecimiento, el Grupo alcanzó unas ventas en 2003 superiores a los 257 millones de euros, con un crecimiento respecto del ejercicio anterior del 5,3 por ciento.
Esta expansión del negocio es el resultado de una estrategia que tiene en la adquisición de empresas, la internacionalización de la actividad, la apuesta por la imagen y la inversión en innovación, sus pilares más importantes. En este proceso, la modernización de los sistemas de información está posibilitando al grupo el soporte necesario para optimizar la comunicación entre sus diferentes sedes y factorías, consolidar homogéneamente sus departamentos y abaratar los costes de sus TIC.
Hace cinco años, tras la implantación de un nuevo sistema de gestión empresarial basado en una solución SAP, el Grupo emprendió una estrategia centralizadora de sistemas que se ajustaba al proceso de globalización previsto ya en aquellos años. El anterior modelo soportado en una plataforma ERP bajo AS/400, desarrollada a medida y que cubría parcialmente las necesidades del grupo (finanzas), no aportaba la información necesaria para una correcta toma de decisiones de negocio.
El proceso de integración y homogeneización de los datos y de la información era pues inevitable, aunque se fue realizando en distintas etapas. Con SAP se cubren actualmente las áreas de finanzas, ventas y distribución, quedando fuera de su paraguas los programas de producción que son gestionados por un sistema especialmente adaptado a las necesidades de fabricación del grupo. Como explica Alfreco Ortiz, responsable de sistemas de información, “en aquellas fechas entendimos que SAP no cubría nuestras necesidades específicas de producción y nos decantamos por el diseño e implantación de una aplicación a medida para este departamento. Hoy día, pensamos sin embargo que, a corto y medio plazo, nuestro SIG continuará siendo la aplicación de producción, pero que SAP tendrá que ir asumiendo cada vez una mayor responsabilidad en estos procesos. A más largo plazo, lo lógico sería que SAP acaparase el tema de producción, aunque habrá que analizar los medios necesarios para conseguirlo”.
Con este planteamiento, la migración hacia SAP Enterprise será decisiva. A finales de este año, el Grupo Calvo culminará el proceso de evolución hacia las nuevas versiones 4.7 de la solución, y será un buen momento para pensar en una mayor integración de todas las aplicaciones.
El cambio afectará también a la propia arquitectura de sistemas y de comunicaciones de la compañía, porque supondrá una evolución de los equipos servidores centrales, del parque informática de sobremesa y de la red de comunicaciones: “la implantación de la nueva versión del ERP nos llevará a evolucionar nuestros actuales servidores basados en Windows, a potenciar los terminales en el puesto de trabajo y a aumentar los anchos de banda de nuestras comunicaciones, dado que SAP 4.7 exige mayores tráficos de datos. Cuando llegue el momento pensaremos si continuar con Windows o entrar en el mundo Unix; en cualquier caso lo único que sabemos a ciencia cierta es que vamos a migrar hacia una arquitectura de 64 bits capaz de direccionar mejor nuestros procesos y aplicaciones y que nos posibilite un futuro tecnológico más innovador”.
La creación de una nueva planta conservera de fabricación en El Salvador ha llevado al Grupo a replantear su estrategia de centralización, puesto que los modelos utilizados hasta ese momento eran costosos y difíciles de mantener, debido a la distancia geográfica entre ambos continentes. La solución al problema se encontró en las tecnologías basadas en Internet.
Por un lado, se estableció la comunicación entre El Salvador y los sistemas centrales de información españoles mediante redes privadas virtuales (VPN)y, por otro, se habilitó un entorno de servidores basado en la solución de Tarantella, que transforma cualquier aplicación en páginas web. De esta forma, las aplicaciones se ejecutan en los servidores centrales y sólo viajan por la red las “fotos” de la aplicación y no ésta en sí misma.
Las soluciones de Tarantella han sido las elegidas por el grupo Calvo para que las sucursales ubicadas en el extranjero puedan acceder a los sistemas internos de forma económica y rápida a través de Internet. Calvo obtiene así un importante ahorro de costes en la comunicación con sus oficinas remotas, que además se benefician de las herramientas que aporta la plataforma para el acceso a la información y a las aplicaciones críticas de negocio. Según Ortiz, “la solución finalmente adoptada no sólo es segura y fiable, sino que además nos permite la flexibilidad y escalabilidad suficientes para ajustarse rápidamente a las futuras necesidades; todo ello con unos costes moderados, resultantes del aprovechamiento de las sinergias de los sistemas informáticos”.
La solución será un pilar importante en las futuros desarrollos pensados para facilitar la conectividad a los sistemas de información de los responsables de negocio del grupo, ya sea a través de equipos portátiles o de dispositivos móviles: “un proyecto demandando por nuestra dirección general que facilitará el acceso a la información y a los sistemas de correo desde cualquier punto de la organización”, afirma Ortiz.
En otro orden de temas, para la construcción de las redes de El Salvador se ha hecho uso del conocimiento y la experiencia adquiridas en las redes españolas, no sólo empleando tecnologías ya desarrolladas, sino implantando nuevos sistemas en las instalaciones, como es el caso de los sistemas biométricos de control de acceso y presencia basados en huella digital.
Por otra parte, la comunicación entre las sedes de ambos continentes se ha visto beneficiada por la instalación de dos equipos de videoconferencia localizados en El Salvador y que se integran con el resto de la red existente: Madrid y la fábrica de Carballo (Galicia) en España y con Modena (Italia), sede de la sociedad Nostromo propiedad del Grupo.
