El fracaso de las compañías con un modelo de negocio basado íntegramente en Internet se ha debido principalmente a no saber transformar el tráfico de Internet en comercio electrónico viable. Además, también han jugado en su contra otros factores como el hecho de que no han sabido brindar al cliente lo que éste demanda, la falta de accionista estables, un erróneo modelo de negocio o la incapacidad del propio equipo gestor, según un estudio de Mercer Management Consulting.
Por eso, serán las grandes compañías -que basan su modelo de negocio en su presencia física- las que tienen más posibilidades de triunfo que aquellas que se han ligado cien por cien a Internet.