Tal y como informaba este medio la semana pasada, la LinuxWorld Expo celebrada recientemente en Nueva York sirvió para que compañías de renombre mostraran sus experiencias con el sistema operativo del pingüino. Es el caso de Morgan Stanley, que ha adoptado Linux como parte fundamental del plan de recorte de gastos del banco de inversiones.
El proyecto se inició a mediados de 2001 con el firme objetivo de reducir los costes sin renunciar a la flexibilidad de infraestructura tecnológica, que consta de unos 6.000 servidores, 25.000 ordenadores de sobremesa y miles de aplicaciones.
En palabras de Jeffrey Birnbaum, máximo responsable de informática de la división de Morgan Stanley, queremos ser capaces de correr cualquier aplicación en cualquier máquina en cualquier momento; en estos momentos cerca del 35 por ciento de nuestros servidores están sobre plataforma Linux.
Y los planes de esta división todavía miran más lejos, dado que según sus expectativas
La distribución de Linux seleccionada fue Red Hat, con la versión 2.4 del kernel que, desde el punto de vista de Michael Tiemann, CTO de Red Hat, proporciona grandes niveles de estabilidad. No obstante, el propio Tiemann aseguró que fue necesario realizar un duro trabajo para poder garantizar que Morgan Stanley pudiera usar el kernel. Para ello se desarrollaron nuevas herramientas y librerías Linux, incluyendo un nuevo soporte de sistema de ficheros, compiladores, herramientas analíticas o capacidades de planificación.
Por otro lado, la filial española de Morgan Stanley ha externalizado su plataforma tecnológica alojando sus equipos en un conocido Data Center ubicado en Madrid. En una primera fase dispondrá de una sala privada con 50 metros cuadrados donde alojar sus equipos, dotada con las mejores condiciones eléctricas y de ventilación, a lo que se añade la disponibilidad de fibras ópticas metropolitanas para construir redes de alta velocidad, así como máxima tolerancia a desastres y redundancia en los sistemas, apunta el director de Comunicaciones y Data Centers de Morgan Stanley, Fernando Ucelay.
Junto al ahorro de costes, Ucelay apunta que externalizar su plataforma supone también acceder a diversas facilidades que no son alcanzables en un edificio orientado a alojar despachos y puestos de trabajo de oficina.
En concreto, el carácter neutral de este IEC implica contar con la oferta de las redes de más de 30 operadores, y Morgan Stanley recibe tanto servicios de comunicaciones como de ISP. La escalabilidad aparece también como ventaja, ya que un banco de inversión como el nuestro realiza un crecimiento constante en equipos y los datacenter internos se quedan pequeños.
Finalmente, estamos estudiando el uso de servicios de almacenamiento y back up a medio o largo plazo, mientras la monitorización se realiza en remoto o se ejecuta mediante los servicios de manos y ojos para el cambio de cintas y el apagado/encendido de los equipos.
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