Al margen ya de los dominios territoriales, los genéricos -.com, .net y .org- suman ya a nivel mundial 36 millones de registros, de los que 22 pertenecen al más difundido .com, mientras que .net y .org alcanzan los 14 millones de dominios restantes. De estos dos últimos dominios, los registros que se han producido en España han sido poco menos que testimoniales, según estimaciones de Nominalia. De hecho, las escasas compañías españolas que han optado por .net centran su actividad en Internet.
Otro aspecto a destacar se refiere al nuevo dominio .info que entró en funcionamiento el pasado 1 de octubre y cuya aceptación está siendo bastante elevada en todo el mundo con un número de registros que ya alcanza los 500.000. Sin embargo, en España, este nuevo dominio está resultando también testimonial en España, donde la mayoría de las solicitudes se dirigen hacia el difundido .com. Todo indica que con .biz pasará lo mismo.
También hay que añadir que, según un informe realizado por la Asociación de Investigación de Medios de Comunicación (AIMC) y en datos facilitados a Europa Press, el 69,9 por ciento de los dominios .es corresponde a sociedades mercantiles, mientras que las asociaciones y fundaciones representan en 8,6 por ciento. Las administraciones, entidades locales y organismos autónomos cuentan con el 3,9 por ciento, mientras que sólo un 3,7 por ciento del dominio territorial español pertenecen a personas físicas.
Según el mismo estudio, la actividad principal de las sociedades mercantiles son los servicios a empresas (29 por ciento), mientras que los servicios personales -incluidos los sanitarios- constituyen únicamente el 10 por ciento.
A pesar de la enorme difusión que en España está teniendo Internet en los últimos años, el número de dominios .es no ha crecido como se podía esperar en los últimos tiempos y sólo alcanza los 33.535 dominios, una cifra muy inferior a los dominios .com originarios de España, que fácilmente podría superar el medio millón.
El éxito de los dominios territoriales está teniendo menos éxito en España que los .com, debido principalmente a una serie de factores como el precio o su complejo proceso de tramitación. Según Cristina Fenoy, directora comercial de Nominalia -una de las compañías que ofrece servicios de dominios en España-, mientras que el coste del registro de un .com es un mínimo de 6.000 pesetas, hacerlo con un .es salta a las 13.000 pesetas de tasas a abonar al ES-NIC, el organismo español que registra los dominios territoriales de España, a lo que hay que sumar una determinada cantidad exigida por la entidad intermediaria, con lo que el coste mínimo podría elevarse hasta las 20.000 pesetas.
A esto hay que sumar las exigencias para registrar un dominio .es ya que hay que demostrar que la marca es del solicitante del registro, que la empresa está físicamente en España, y que el nombre de dominio no puede ser ni un nombre genérico ni un topónimo. A este respecto, hay que añadir una nueva normativa que aprueba que, para el .com, se adopten nombres genéricos para los dominios de uso público, principalmente utilizados por organismos gubernamentales.
Además, los plazos de registros pueden superar el mes, mientras que en el caso del .com la totalidad del proceso de registro se puede realizar incluso en el mismo día.
De esta forma, muchas empresas españolas se decantan por el .com, al contrario que en otros países donde las exigencias para registrar el dominio territorial son menores. De hecho, según los últimos datos, España ocupa una posición razonable en el registro de dominios .com en Europa, sólo superada por Alemania, Reino Unido y Francia, y aventajando ligeramente a Italia. De esta forma, según estimaciones de Nominalia los dominios .com contabilizados con DNS con origen en España podría superar el citado anteriormente medio millón de registros.