¿Cómo valora la evolución de los sistemas en los últimos años?
Desde mi primera responsabilidad como programador hasta llegar a asesorar a las grandes compañías para mejorar sus procesos informatizados, han cambiado básicamente dos aspectos.
El primero es que el servicio al cliente se ha convertido en un diferenciador para el negocio masivo. Las empresas deben mantener un ritmo constante en la innovación de sus productos y servicios para mantener satisfecho al cliente sin que conlleve costes muy elevados. Es decir, la empresa debe ofrecer más por menos mediante la optimización de sus recursos.
En segundo lugar, mantener la cuota de beneficios a la vez que se reducen los costes. Para ello, es necesario aprovechar todo el capital intelectual mediante la gestión de personas.
¿En qué medida han afectado estos cambios de negocio al departamento TI?
Hace tiempo, sólo se contemplaba la industria de procesos de sistemas. Por entonces, el departamento TI reportaba al director financiero porque era una función que no contribuía tanto al beneficio, sino que más bien constituía un coste de servicio.
Sin embargo, hoy en día el departamento TI debe reestructurarse, ya que se ha convertido en un motor diferenciador esencial de las organizaciones frente a la competencia.
Al final, ha sobrepasado al departamento financiero. De ser un agujero negro, donde recibía fondos de todos los demás departamentos, ahora tiene su propio despacho. Por eso debe demostrar su capacidad.
¿Y en cuanto al personal?
Actualmente estamos viviendo un momento repleto de adquisiciones y cambios, y lo más complicado de estos cambios es conseguir que el personal de las empresas los asuma deprisa.
A su vez, hay una gran carencia de técnicos cualificados, porque la tecnología cambia tan deprisa que es difícil saber qué nivel de rendimiento es el adecuado.
La gente ha estado programando en Cobol durante 30 años. Después todo cambió de repente y aparecieron los grandes sistemas mainframe hasta llegar a Internet. Y el cambio ha sido tan rápido que obliga a reciclar constantemente el personal. Por esta razón seguiremos contemplando grandes movimientos en los próximos meses.
Entonces, ¿cuál es la tendencia que marcan los modernos procesos?
La integración es la base de cualquier proceso en la actualidad. El 70 por ciento de las grandes aplicaciones de misión crítica en el mundo corren sobre un mainframe de IBM.
Ahora se pasa a programar en Java, .Net o SOAP. Y lo fundamental y más complicado es la integración entre todos estos sistemas. El departamento TI se enfrenta así al nuevo reto de reducir costes y minimizar los riesgos, facilitando una transición no traumática a la vez que permite innovar en productos y servicios que se lanzan en un tiempo récord.
¿En qué medida afecta a los recursos destinados para la automatización de procesos?
Hace tan sólo tres meses hubo un cambio importante en Europa. Antes la prioridad era desarrollar aplicaciones rápidamente, y ahora ha cambiado a reducir costes.
El propio gasto en TI debería reducirse un 3 por ciento cada año en términos reales, mientras que ciertos sectores como las entidades financieras pretenden recortar su gasto en un 5 por ciento a la vez que destinan un 50 por ciento más de recursos en CRM para fidelizar clientes. Y resulta muy complicado hacer compatible esta subida y bajada paralelas.
¿Cómo conseguir esta reutilización e integración de las aplicaciones tradicionales?
Con el objetivo de pensar en la continuidad del negocio, las empresas deben tener el software correcto sobre la red correcta, y no una infraestructura justa o excesiva.
Con las soluciones de Compuware, aseguramos la continuidad del negocio, ya sea en períodos de crisis o de vitalidad económica, garantizando que cada organización soporte la tecnología correcta, además de reducir a la mitad los tiempos de implantación y mejorar la calidad en un 80 por ciento.
¿Cuál es el futuro de los nuevos entornos de programación enmarcados en la era Internet, como .Net o Sun ONE?
Como partners estratégicos de ambas compañías, pienso que .Net constituye una tecnología fundamental para la comunidad de desarrolladores, aunque aún tardará algún tiempo en adoptarse ya que ahora los cambios son más lentos por el riesgo y la inversión que implican al testear un producto muy nuevo.
Sí es importante resaltar que .Net generará muchas aplicaciones que serán compartidas, para lo que trabajamos de cerca con la compañía.
¿Qué otras fórmulas se barajan para reducir costes en infraestructura tecnológica?
Aproximadamente un cuarto de las organizaciones clave en Europa están estudiando una nueva fórmula para evitar renovar un tercio de su infraestructura cada año.
Está basada en una teoría de la que Larry Ellison ya hablaba en 1995 conectar todos los ordenadores en red y eliminar los PCs. Es algo que va a suceder pronto, pero de una forma diferente. Como el gasto en desktop ya está hecho, es necesario aprovechar la infraestructura de equipos durante más tiempo, gracias a un la conexión al servidor central mediante Citrix o soluciones de Microsoft. Gracias a esta plataforma multiproceso, el servidor corre múltiples aplicaciones Windows, el PC sólo se usa como un medio transmisor de datos a lo largo de la red, capitalizando así la inversión durante más tiempo, en lugar de cambiar el equipo cada tres años.
Para conseguirlo, hace falta un proceso orientado a establecer las prioridades y simplificar las redes.
Precisamente la ampliación del ancho de banda para mejorar las transacciones y procesos constituye una asignatura pendiente…
El ancho de banda es uno de los factores más costosos para las empresas en la actualidad, porque requiere jugar con los picos. Así, se está buscando algunafórmula para redefinirlo. Compuware propone utilizar una transmisión convencional de Internet en lugar de ancho de banda dedicado para ciertos procesos, y esto se hace securizando la red con los nuevos mecanismos de encriptación. Aunque se reduzca la calidad, es factible y tan sólo se paga por el servicio al ISP, de momento.
¿Hasta cuándo convivirá el mainframe con la arquitectura cliente-sevidor?
Hace dos décadas tan sólo había mainframes, desarrollados por cerca de veinte fabricante. Después cambió, pero el único fabricante verdadero de mainframes sigue siendo IBM. Es un actor que vende potencia y millones de instrucciones por segundo, con un incremento del 25 por ciento en rendimiento cada año.
El negocio de mainframes continuará creciendo en términos de potencia y no de unidades, mientras que el coste de integrar aplicaciones queda significativamente reducido frente a una granja de servidores, cuyo negocio también se incrementará.
