Acer ha cerrado el ejercicio 2002 con unos resultados a nivel mundial de 13.000 millones de euros, de los cuales un 51 por ciento corresponde a la región EMEA, que ha experimentado un crecimiento del 18 por ciento, una cifra bastante satisfactoria considerando la difícil situación del mercado PC.
Acer EMEA afronta el nuevo año en base a una nueva organización que subdivide el mercado en cuatro regiones y engloba cinco unidades de negocio comunes y verticales en función del tipo de producto (notebook/PDA, ordenadores de sobremesa profesionales y ordenadores de sobremesa de consumo, servidores, periféricos y servicios). La compañía y su canal, dado que Acer apuesta al 100 por cien por la venta indirecta, tendrá que centrar sus esfuerzos en las últimas cuatro unidades debido a que el segmento de portátiles es el que goza de la mejor situación debido al significativo aumento de la demanda en este ámbito. Y es que ya en 2002 los portátiles representaron para Acer EMEA el 64 por ciento de su negocio, seguidos del entorno desktop (20 por ciento), los monitores (12 por ciento), los servidores y los complementos (ambos con un 2 por ciento).
, afirmó el recientemente nombrado presidente de Acer EMEA, Gianfranco Lanci, quien comentó que el futuro de Acer está en el reconocimiento de su marca en asociación con una compañía que era principalmente fabricante y se ha transformado en una empresa de marketing y servicios.
Por su parte Acer Ibérica, cuya facturación en 2002 ascendió a 155 millones de euros, pretende colocarse en una de las tres primeras posiciones del mercado de PCs en España, como señaló el country manager de Acer Ibérica, Antonio Papale, quien apuntó que la racionalización del canal será la base para el crecimiento de 2003.
