El CEO de Cap Gemini, Paul Hermelin, ha negado los rumores que se habían dispararon en torno a la posible venta de las operaciones en Norteamérica del gigante de servicios TI de origen francés tras la publicación de un artículo en el New York Times, según el cual Cap Gemini estaría “buscando un partner para sus operaciones norteamericanas”.
“Cap Gemini niega tener planes para vender sus actividad en Norteamérica”, afirma en un comunicación Hermelin, quien asegura que “nuestra energía estará enteramente dedicada en la mejora de nuestro rendimiento operativo en esa zona”.
En el tercer trimestre el negocio de Cap Gemini en esa región creció un 2,8 por ciento después de sufrir una caída del 22 por ciento en el primer semestre, que llevó a la compañía a poner en marcha una nueva reestructuración en la que se contempla el recorte de 1.500 empleos.
“La venta de las operaciones en USA con el simple objetivo de obtener liquidez se basaría en una visión a muy corto plazo”, considera el analista de Ovum, Douglas Hayward, quien considera que “la venta como decisión estratégica para reorientar su foco desde una posición global a otra regional como hizo Atos Origin tendría relativamente más sentido, pero un cambio de estrategia tan importante en este momento sería muy arriesgado”.
En opinión de los analistas de Ovum, además de las malas condiciones del mercado norteamericano, la adquisición de Ernst & Young) en 2000 por un montante desproporcionado (11.500 millones de dólares) ha tenido una influencia directa en la evolución de la compañía, en tanto el proceso de fusión absorbió recursos y esfuerzos que deberían haberse dirigido al desarrollo de un negocio de outsourcing capaz de proteger a la empresa del declive que se inició en 2001.
