La Confederación Nacional de Sordos Españoles (CNSE) está inmersa en un ambicioso proyecto, bajo el nombre de Red Sorda, con el que pretende interconectar a la comunidad de personas no oyentes a través de una VPN (Virtual Private Network). Para ello ha contado con la estrecha colaboración de KPNQwest, tras haber descartado previamente varias alternativas.
Uno de los mayores méritos del proyecto radica en la comparación entre el punto de partida y la meta marcada. En un principio, el proyecto fue concebido como una red local con la que pretendían consolidar servidores e interrelacionar los ordenadores para favorecer el intercambio de información. Poco a poco la el interés por parte de la Fundación CNSE (FCNSE) se incrementó y ello, unido a problemas como las constantes caídas de las líneas, hizo que el proyecto comenzara a tomar mayores dimensiones.
En este punto se comenzaron a barajar distintas posibilidades para comenzar la construcción de una VPN pero, tal y como indica Javier Domínguez, coordinador de redes, no está claro cuál es el producto estándar porque dependiendo de con qué compañía hablases para un mismo fin te ofrecían diversas soluciones. Sin embargo, hace aproximadamente unos cuatro meses se optó por trabajar con KPNQwest. El propio Domínguez indica que su imagen y reputación eran ya de por si una garantía añadida para la parte más importante del proyecto. Asimismo, KPNQwest conseguía superar las limitaciones que otras firmas no eran capaces, hasta el punto de que según el coordinador de redes, otro operador de la competencia nos ofrecía unos precios muy competitivos pero eran incapaces de centralizar el conjunto de las operaciones en la sede de Madrid. El operador de origen holandés, en cambio, sí.
De este modo, la Red Sorda ha conectado en un primer momento a ocho federaciones, entre las que destacan Madrid y Barcelona; en la actualidad la CNSE se encuentra en pleno proceso de auditoría para incorporar a la VPN a otras 15 federaciones, de manera que para finales de año la Red Sorda podría estar constituida por 23 centros.
En cuanto al coste del proyecto, Leandro Rodríguez, responsable del proyecto Red Sorda desde la FCNSE, explica que, como ONG que es la institución, está sometida a las subvenciones. Para este proyecto en concreto se ha contado con las aportaciones de la Fundación ONCE y de los Ministerios de Ciencia y Tecnología y Trabajo y Asuntos Sociales.
Dentro del marco de lo que supone un proyecto de I+D, Domínguez tiene claro que queremos trabajar con lo último de lo último, contando con las plataformas estándares de mercado. Así, una de las iniciativas puestas en marcha es la de desarrollar una aula de formación, teleasistencia y teleempleo con plataforma Microsoft en su inicio para migrar después a Linux. En función de los resultados, iríamos extendiendo la experiencia a otros ámbitos de la red, apunta Domínguez.
En lo que a infraestructura tecnológica se refiere, la CNSE cuenta con servidores Compaq ProLiant -de lo que destacan el excelente servicio de soporte– operando con la plataforma Windows NT 4.0, aunque próximamente migrarán hacia Windows 2000 y adquirirán tres servidores Compaq más. El coordinador de redes también destaca su control de discos RAID1 y sus desarrollos de red que combina GigaBase y 100Base-T (Fast Ethernet que funciona como el Ethernet tradicional pero con velocidad punta de 100 Mbps).
Paralelamente, otra de las iniciativas que llevarán a cabo la Confederación y la Fundación es la puesta en marcha de un Campus Party especial para sordos del 6 al 9 de diciembre en Mollina (Málaga), para cuya celebración cuentan con el apoyo del INJUVE y se encuentran en negociaciones con diversos suministradores tecnológicos.
