En una operación valorada en 23.600 millones de pesetas (142 millones de euros), IBM ha adquirido la compañía CrossWorlds Software con el fin de reforzar su posición en el segmento de software para e-business, un área que, conocida como middleware, se configura como una de las de mayor crecimiento dentro del sector y como prioritaria para el Gigante Azul.
Con sede en Burlingame (California), CrossWorlds es un proveedor de software centrado en la automatización de procesos empresariales, cuyos desarrollos soportan estándares abiertos de Internet tales como J2EE y XML.
La compañía cuenta con una plantilla formada por 350 personas y una cartera de clientes entre los que destacan compañías como Siemens, Whirpool Corporation o Caterpillar. Todos ellos hacen uso tanto del software de CrossWorlds como de WebSphere de IBM para desarrollar sus negocios en la Red.
Fuentes de IBM han asegurado que una vez se haya completado la adquisición, el Gigante Azul integrará tanto las operaciones de CrossWorlds como el global de su plantilla en su división de software. En paralelo, la compañía que preside Louis Gertsner venderá los productos de la recién comprada utilizando la fuerza de ventas de ambas empresas, al tiempo que extenderá sus inversiones a los productos de CrossWorlds para sus actuales clientes e ISVs (Desarrolladores de Servicios Internet) y ampliará sus acuerdos con integradores de sistemas. Por otra parte, se ha anunciado que IBM Global Services incluirá los productos de CrossWorlds en su oferta.
Fuentes de la propia IBM han asegurado que los paquetes desarrollados por CrossWorlds integran múltiples aplicaciones, entre ellas la tan en boga gestión de relaciones con los clientes (CRM), la gestión de la cadena de suministros (SCM) o los tradicionales sistemas de gestión empresarial (ERP). Pero el catálogo de la recién adquirida dispone además de productos para la integración de procesos en sectores puntuales como son, por ejemplo, el de telecomunicaciones, los servicios financieros o la industria en diversas vertientes.
