Apoyándose en los logros conseguidos con anterioridad al calor de programas como Info@landalus 2002-2004, la Comunidad Autónoma de Andalucía, que ha gozado en los últimos años del mayor aumento del PIB doblando con un 20,4 por ciento la media de la Unión Europea, ha definido un nuevo marco que, recogido en el Plan de Innovación y Modernización de Andalucía (PIMA) y con el año 2010 como horizonte, establece la innovación como el factor clave para su progreso en base a una organización en la que la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa actúa como un organismo vertebrador de las distintas iniciativas dirigidas a impulsar la convergencia entre las Comunidades Autónomas españolas, un proceso en el que ha avanzado de forma sustancial en los últimos años.
Con una inversión total planificada de 5.682 millones de euros para el periodo 2005-2010, el PIMA establece seis áreas estratégicas que engloban múltiples y diversas líneas de actuación. La primera área alude a una Política de Igualdad de Oportunidades Digitales (e-igualdad), que cuenta con una inversión de 92,8 millones; la segunda al Impulso Emprendedor y Desarrollo Empresarial, que dispone de 1.823 millones; la tercera hace referencia a la Sostenibilidad en materia de Medio Ambiente y Energía, y absorbe una inversión de 560,3 millones; la cuarta a la Política de Industria del Conocimiento y Universidades, que acapara el grueso de la inversión con 2.667 millones; la quinta a la Sociedad de la Información, que atrae un presupuesto de 482,4 millones; y la sexta apunta a la Administración Inteligente o i-Administración, que cuenta con una inversión de 55,5 millones.
Por otra parte y como responsable de la coordinación transversal de dichas acciones, la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa ya ha establecido distintos acuerdos con distintas Consejerías del Gobierno Andaluz para avanzar en los ámbitos en los que éstas tienen competencia. Entre estos convenios, destacan el nuevo marco de colaboración firmado con la Consejería de Industria el pasado diciembre que, con una dotación de 50 millones de euros, contempla casi una veintena de acciones.
Se trata del cuarto convenio establecido por la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa tras los establecidos con la Consejería de Turismo, Comercio y Deportes, que cuenta con una inversión de 100 millones de euros y tiene como objetivo mejorar y modernizar los servicios turísticos y la aplicación de las nuevas tecnologías en los ámbitos de competencia de dicha Consejería; la Consejería de Cultura, y el alcanzado en primer lugar con la Consejería para la Igualdad y Bienestar Social.
Parte de la inversión total asociada al PIMA procederá de los Fondos Europeos, aunque no hay que olvidar que esas ayudas se reducirán gradualmente. En efecto y de acuerdo con el nuevo marco presupuestario 2007-2013, Andalucía continuará beneficiándose otros siete años de las ayudas europeas con una cantidad que asciende a 12.861 millones de euros, es decir, el 40 por ciento de los recursos que la UE destina a España, en lugar del 30 por ciento recibido en el marco anterior. Además, de los 2.000 millones de euros adicionales con cargo al Fondo de Desarrollo Regional (FEDER) pactados con la UE que recibirá España según el presupuesto para 2007-2013 para fortalecer la investigación y el desarrollo en las empresas, 800 millones se dirigirán a la Comunidad andaluza, que se cuenta entre las regiones incluidas en el objetivo de convergencia de desarrollo prioritario-, es decir, con una renta inferior al 75 por ciento de la media de la UE.
En todas las áreas estratégicas que recoge el PIMA las TIC tienen un peso muy relevante y, concretamente, juegan un papel de primer orden en las áreas de Sociedad de la Información e i-Administración, que suman un total de siete (planificación, infraestructuras, accesibilidad, servicios tecnológicos, formación, información, y regulación, seguridad y evaluación) y tres (gestión y coordinación, servicios digitales y participación ciudadana) líneas estratégicas, respectivamente.
Dentro del área de Sociedad de la Información, destacan líneas como la de infraestructuras, que persigue conseguir la interconexión de todo el territorio andaluz. El alcance de ese objetivo pasa por la extensión de la banda ancha en toda la Comunidad Autónoma andaluza, la ampliación de la red corporativa de la Junta de Andalucía a la totalidad de los centros dependientes de la misma, así como a otros en los que así se convenga mediante acuerdo, y la finalización del despliegue de Centros de Acceso Público a Internet en todos los municipios de la Comunidad, sin olvidar el establecimiento de infraestructuras de pago electrónico.
La Administración Inteligente es otra de las áreas en las que se están concentrando los esfuerzos y, de hecho, el PIMA establece que antes de 2010, la totalidad de los procedimientos y servicios relacionados con el ciudadano de la Administración de la Junta de Andalucía se oferten de forma digital. Asimismo se contempla lograr la interoperabilidad de todos los sistemas y tecnologías intra e interadministraciones públicas, un paso determinante para el desarrollo la Ventanilla Única Electrónica de la Administración Pública, previsto para antes de 2008.
En el cumplimiento de este objetivo, también serán pasos claves la creación del denominado Portal Inteligente de la Junta de Andalucía, así como la creación de la Base de Datos digitales del Ciudadano de Andalucía y de la Tarjeta única del Ciudadano.
No obstante, todavía queda mucho camino por recorrer. Andalucía ocupa la quinta posición en el ranking de inversión pública en España y se constata la necesidad de desarrollar la inversión privada en investigación en Andalucía equiparándola a la media nacional y de la Unión Europea, cuya inversión en I+D+i se sitúa actualmente en el 1,9 por ciento, un porcentaje que se pretende elevar hasta el tres por ciento.
En este escenario, el Plan Andaluz de I+D+i (PAIDI) pretende general un desarrollo científico y tecnológico en el ámbito investigador y empresarial, capaz de intensificar los sectores con más potencial de generación de riqueza, como es el sector TIC. No en vano, en los siete primeros meses tras la puesta en marcha el pasado junio por parte de la Consejería de Innovación, Ciencia y Empresa, de la Orden de Incentivos para el Fomento de la Innovación y el Desarrollo Empresarial de Andalucía, con la que se aglutinaron las 15 disposiciones normativas que hasta ese momento regulaban la concesión de subvenciones a cuatro tipo de proyectos (Creación de Empresa, Modernización, Cooperación competitiva e I+D+i, se aprobaron incentivos por valor de 57,1 millones de euros para 938 proyectos empresariales, de los que 36,8 millones se destinaron directamente a proyectos de Innovación.
El montante restante se repartió entre las líneas de Creación de Empresas, Modernización, Cooperación y el Plan de Consolidación y Competitividad de la Pyme (PCCP). Hay que puntualizar, que la totalidad de incentivos aprobados ha apoyado una inversión privada de 280,3 millones, la creación de 1.172 puestos de trabajo y el mantenimiento de 8.553 empleos.
En este escenario, se ha puesto un foco especial en las pymes, en cuyo avance repercuten tanto las acciones genéricas, especialmente en materia de infraestructura, como otras específicas entre las que cabe destacar el desarrollo de los programas Incorporatic, para la accesibilidad a Internet y a un paquete global de servicios digitales, y Legista, para la digitalización de las cadenas de suministro y logística interna.
También resultará fundamenta en el proceso de convergencia, la labor de la Corporación Tecnológica de Andalucía, que se constituyó formalmente el pasado 10 de octubre con un capital inicial de 84 millones de euros aportados al 50 por ciento por la Agencia de de Innovación y Desarrollo de Andalucía (Idea) y por las empresas patronos y las entidades participantes.
En la Corporación Tecnológica de Andalucía participa la Administración autonómica a través de Idea, así como 33 empresas de sectores estratégicos, nueve entidades financieras, el Consejo Andaluz de Universidades y los grupos de investigación de la CCAA.
