BMC Software está cambiando, en todos los sentidos y desde dentro, dado que ha modificado su cúpula directiva contando para ello con la gente de la casa. Por una lado, Jorge Dinarés, el que fuera durante muchos años la cabeza visible de la filial española y posteriormente iniciara la andadura de los servicios profesionales para EMEA como vicepresidente, acaba de ser nombrado vicepresidente de la compañía para el sur de Europa. Desde su nueva posición, Dinarés indicó que uno de los objetivos de la compañía es conseguir que sus facturación se reparta al 50 por ciento entre sistemas distribuidos y s/390 y apuntó que en los próximos tres meses BMC podría hacer público algún anuncio muy interesante relacionado con adquisiciones.
Asimismo, Dinarés dibujó la estrategia de la empresa siempre con trazos de aplicaciones, esto es, de ofrecer un modelo de gestión basándose para ello en las aplicaciones -con su iniciativa de gestión de aplicaciones en red-. En esta misma línea, Gloria Alomá, la nueva directora general para la subsidiaria española, puntualizó que este enfoque también se llevará acabo en nuevas áreas en las que se adentra la empresa, como son las de conectividad y almacenamiento. Asimismo, la pyme será otro de los elementos clave dentro de la estrategia de la compañía, contando con la colaboración de su red de partners, y su iniciativa de alquiler de aplicaciones, sin llegar a convertirse en ASP. Precisamente en este punto, Dinarés subrayó que la solución global que ofrece BMC y un mayor acercamiento a los clientes se erige como factor diferencial respecto a sus competidores. Paralelamente, BMC también refuerza compromisos con otras empresas como es el caso de Oracle, ampliando su alianza tecnológica.
