Si en el sector de las Tecnologías de la Información hay un modelo empresarial que se apoye en alianzas estratégicas, acuerdos y relaciones comerciales ése es el basado en la fórmula ASP. Es aquí donde entran en juego los operadores de telecomunicaciones, socios indispensables en un negocio que ha hecho, entre otras ventajas, de la rapidez en el servicio su banderín de enganche. Su verdadero valor reside en ser los propietarios de unas redes de comunicaciones cuyo núcleo comienza en los servidores en los que se instalan las aplicaciones objeto de deseo de las compañías clientes, y cuyos extremos concluyen en esas mismas firmas.
La mayoría de las consultoras de investigación y análisis de mercado coinciden en destacar tres actores privilegiados en el mundo de los ASP. El primer vértice, lo constituyen, por un lado, los fabricantes de software que, con una amplia experiencia a sus espaldas a la hora de diseñar soluciones empresariales, tienen un conocimiento de mercado de primera mano. Compañías como SAP, Oracle, PeopleSoft o incluso Microsoft, no sólo disponen de una gama de soluciones que las convierte en los abanderados del movimiento ASP sino que este nuevo modelo les permitirá ampliar su tradicional base de clientes para abordar el atractivo mercado de la pequeña y mediana empresa.
Por otro lado, aparecen los integradores, donde firmas como Arthur Andersen, PricewaterhouseCoopers o Deloitte Consulting mantienen sus posiciones predominantes gracias a un conocimiento tecnológico que, en estos primeros tiempos del mercado de los ASPs, se valora al alza. Hasta cierto punto, la escasez de profesionales que sufre el mercado de las TI les concede una cierta distinción de privilegio.
El tercer vértice fundamental de un triángulo ASP en el que todos los ángulos se apoyan y se sostienen recíprocamente lo constituyen los propios operadores de telecomunicaciones. Su infraestructura les da el caché necesario como para convertirse en pieza básica del negocio. Por un lado, la capilaridad de sus redes -muy enfocadas en los centros de negocio de las principales ciudades europeas- se revela requisito indispensable a la hora de llegar hasta las potenciales compañías clientes. Por otro, sus centros de datos, en los que, albergarán las aplicaciones de los clientes, se convertirán en la piedra angular a la hora de ofrecer sus servicios de housing/hosting.
Como complemento al atractivo de los operadores en este modelo hay que sumar la inmensa base de clientes con que cuentan, principalmente los encuadrados en el segmento empresarial, muchos de los cuales ya reciben servicios de valor añadido en el campo de las telecomunicaciones. A este tipo de clientes no sería muy complicado incluirles en su oferta las nuevas aplicaciones y servicios que caracterizan al modelo ASP.
A pesar de los intentos de algunos operadores, su lógica falta de experiencia en el mercado de las aplicaciones para procesos de negocio les ha hecho buscar la colaboración tanto de los fabricantes como de los integradores.
El primer operador que abrió la veda y se incorporó a la moda de los proveedores de servicios fue Telia Iberia (antigua Unisource) que, tras la adquisición por parte de la operadora sueca, decidía apostar claramente por este modelo de negocio. Para el proyecto recurrió a la colaboración de Sun Microsystems y Baan para cubrir el suministro de aplicaciones de software, mientras que Andersen Consulting se encargaba de la consultoría e integración.
Para llevar a cabo la distribución abrió un portal en Internet en el que se podían encontrar desde soluciones ERP a CRM u otras aplicaciones centradas en el área financiera. Su ventaja radica en su infraestructura de red, recientemente complementada con la tecnología MPLS que le permite contar con mayor capacidad.
Otro de los operadores que ha puesto mayor interés en basar parte de sus negocios en este modelo es Uni2. La operadora lanzó recientemente el portal Comtenidos.com, una plataforma en la que, principalmente las pymes, pueden hallar aplicaciones y herramientas necesarias para adaptar su negocio tradicional a las demandas de la nueva economía.
Por su parte, KPNQwest recientemente ha estrenado en España una nueva variante de la fórmula ASP. La compañía ha apostado por el modelo de proveedor de infraestructura de aplicaciones (AIP), que le permitirá convertirse en suministrador de los servicios que necesitan los ISPs, integradores de sistemas, proveedores de software independientes o los propios ASPs. Entre los servicios integrados en su oferta AIP cabe citar el acceso a la red de KPNQwest, infraestructura de transmisión de datos, aplicaciones de seguridad, puntos de acceso de pago, gestión de nivel de servicios, certificación de aplicaciones, canales de marketing o servicios de facturación y atención al cliente.
Colt Telecom es otro de los operadores que está realizando ciertas operaciones al estilo ASP, principalmente a través de sus servicios de housing/hosting y servicios relacionados con las aplicaciones.
Además, hay otros operadores que están a punto de subirse al carro de los ASP como es el caso de Airtel, que el pasado mes de diciembre anunció que, tras su trayectoria como ISP, el siguiente paso será afrontar su faceta como proveedor de servicios de aplicaciones. Aún así, aunque los directivos de la operadora lo contemplan como una evolución inevitable, no han precisado cuándo abordarán este modelo.
Uno de los últimos operadores que se incorporará al territorio ASP será Ola Internet que, a través de la reciente integración de Logic Control, pondrá en marcha este tipo de negocio. Logic Control se encuentra sumida en un proceso de migración de sus aplicaciones hacia un modelo ASP, con la idea de proveer a Ola de las citadas aplicaciones al tiempo que ésta le facilita la infraestructura de conectividad necesaria para el desarrollo de este nuevo modelo. Además, Ola Internet está llegando a diferentes acuerdos con ISVs para poder albergar sus aplicaciones en modelo ASP en su data center.
