El apoyo de las iniciativas oficiales

La concienciación de la Administración pública y de los organismos empresariales de la idiosincrasia del tejido empresarial español, ha derivado en la puesta en marcha de iniciativas que faciliten la modernización tecnológica de este tipo de empresas.

Publicado el 21 Nov 2001

En un mercado tan caracterizado por la presencia mayoritaria de las pequeñas y medianas empresas como el español parece obvio que la inversión realizada por las grandes corporaciones en materia de e-business no es representativa, ni siquiera sirve para tomar el pulso al desarrollo tecnológico global, porque no representa más que una mínima parte del total.

Por eso, tanto desde la Administración Pública como desde una serie de organismos empresariales se ha adquirido conciencia de la importancia de acelerar la introducción de las llamadas Nuevas Tecnologías en un sector que tradicionalmente se ha caracterizado -bien por motivos económicos o sus característicos modelos de negocio- por sus reticencias a afrontar inversiones en áreas donde era difícil cuantificar los beneficios a muy corto plazo.

El espaldarazo para aupar a las pymes hacia las nuevas fronteras del e-business llega de la mano de una serie de iniciativas que, impulsadas desde el Ministerio de Ciencia y Tecnología en el marco global del Plan Info XXI, se apoyan para su difusión en una serie de organismos, como las Cámaras de Comercio, para lograr una mayor capacidad de actuación.

Recientemente, Anna Birulés, ministra de Ciencia y Tecnología, firmó un convenio con el Consejo Superior de Cámaras de Comercio con el objetivo de fomentar el uso de Internet entre las pymes españolas. El proyecto, que contaba con un presupuesto de 213 millones de pesetas (1,28 millones de euros) para un periodo de seis meses, prevé impartir cursos de formación a más de 600 personas, además de ofrecer servicios de asesoramiento a unas previsiones de 240 empresas.

El convenio, que supone la renovación del Programa de Iniciación al Comercio Electrónico (Prince XXI) se divide en dos acciones diferenciadas -atendiendo tanto a las pymes como al trabajador autónomo-, con el objetivo de llegar hasta 4.000 empresas diagnosticadas y formar a 5.000 profesionales a través de 250 talleres en toda España.

El Programa Prince XXI, en una primera etapa desarrollada desde el mes de marzo de 2000 hasta el mismo mes del presente año, logró movilizar a 72 Cámaras, lo que se tradujo en 115 asesores y 136 consultoras especializadas que apoyaron sobre el terreno a las pymes.

La primera fase del Programa, que tuvo su modelo en una iniciativa similar que se realizó para fomentar la adaptación al euro, alcanzó a 11.200 empresas a las que se realizaron informes personalizados. De esa cifra se seleccionaron 700, a las que se asignó un consultor durante tres meses para ayudarles en la implantación de herramientas Internet y modelos de comercio electrónico aplicados a la gestión diaria de su negocio, lo que se ha traducido a su vez tanto en un aumento de la competitividad como en la creación de un empleo cualificado.

Si en la primera fase el Programa abordó al segmento de empresas industriales, en esta segunda etapa el objetivo es afrontar compañías del ámbito comercial -teóricamente menos avanzadas en la adaptación de herramientas Internet que las industriales-, además de los autónomos, lo que hace que la labor sea incluso más complicada.
Recientemente, también se ha puesto en marcha el programa Artepyme II (Acciones Regionales de Telecomunicaciones para Pymes) que, con un ámbito de actuación que se extenderá hasta el año 2006, persigue potenciar también los proyectos de comercio electrónico a través de Internet. Artepyme II se basará en la concesión de subvenciones -que podrían llegar a cubrir hasta el 60 por ciento del coste total del proyecto- que alcanzarán un valor de 15.000 millones de pesetas (90,1 millones de euros) que premiarán, no sólo las citadas iniciativas de comercio electrónico, sino también todos aquellos proyectos que fomenten las nuevas formas de trabajo a través de Internet o la implantación de sistemas avanzados de telecomunicaciones.

Por el momento, Artepyme II ya ha premiado 16 nuevos proyectos, que se han beneficiado de una subvención de alrededor de 600 millones de pesetas (3,6 millones de euros). Entre ellos cabe citar a la Central de Reservas Hoteleras de Cantabria, iniciativa promovida por la Asociación Empresarial de Hostelería de Cantabria; una red virtual de comercio electrónico amparada por la Asociación Nacional de Comerciantes de Equipos, Recambios y Accesorios para la Automoción, o el proyecto Asesoría.com-Oficina Digital, presentado por la Asociación de Asesores de Empresas de Internet.

Hay que recordar que Artepyme I sirvió para impulsar hacia iniciativas de comercio electrónico a 30.000 pymes, la mayoría procedente del sector de los servicios.

Por su parte, la Comisión Europea se ha venido a sumar a la ofensiva del e-business entre las pymes con la aprobación de una iniciativa, que bajo el nombre de Euro Info Centre, tiene como objetivo proporcionar a las pymes información y consejos para implantar modelos de comercio electrónico. La campaña, desarrollada en 18 países europeos -los 15 más Islandia, Grecia y Noruega- y que se integra dentro de la iniciativa GoDigital, pondrá en marcha una red de 282 centros que tendrán la misión de ayudar a las pequeñas y medianas empresas del Viejo Continente en su migración hacia la Nueva Economía.

En España, la campaña estará coordinada por el Centre Balears Europa, dependiente del gobierno balear, y se dedicará fundamentalmente a actividades de asesoramiento en temas como firma digital, transacciones comerciales, temas legales o financieros. El objetivo de la iniciativa en España pasa por lograr que alrededor de 5.000 pymes españolas sean asesoradas a través de los 16 euro info centros -integrados por diferentes organismos e instituciones- que se han sumado al proyecto en España.

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Redacción Computing

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