Las empresas españolas invierten por debajo de la media europea en I+D+I en comparación con las compañías del resto de países comunitarios, según ha dado a conocer el ministro de Ciencia y Tecnología, Josep Piqué, que aclara también que las compañías no aprovechan las ventajas fiscales que se les ofrece para deducirse sus gastos en innovación.
De este modo, Piqué indica que a pesar de que España, según datos de 2001, ha alcanzado un récord en inversión en innovación, el 0,96 por ciento del PIB, en absoluto puede quedar satisfecha, porque es la mitad de la media europea, que alcanza el 1,8 por ciento. Además, señala que si en el ámbito público aumenta la inversión en este campo, en el privado ha bajado, del 53,6 por ciento de 2000 al 52,4 por ciento actual. Estamos retrocediendo en el ámbito privado y España está por debajo de la media europea, que es del 65 por ciento. Por esta razón, hay que conseguir que el mundo empresarial participe mucho más en el esfuerzo innovador ya que es importante que el tejido productivo aproveche mejor los recursos, comenta.
Por otro lado, el ministro insta a las firmas a sacar más rendimiento a las deducciones por inversión en Nuevas Tecnologías, que no se están aplicando. Por último, y en opinión de Piqué, es necesaria más cultura innovadora dentro de las empresas y dar más importancia a la I+D. La sociedad sólo será próspera si la convertimos en la sociedad del conocimiento, pero en todos los ámbitos de la vida.
