A pesar de que el tercer trimestre ha significado la puesta de largo de la ambiciosa estrategia Adaptive Enterprise, el tercer trimestre fiscal de HP no ha disfrutado de las cifras que cabría esperar. La propia Carly Fiorina, presidenta y CEO de la compañía, ha justificado en cierto modo los resultados alegando que el tercer trimestre siempre es uno de los más duros, si bien es cierto que admite que debería haberse actuado mejor. No obstante, la CEO mira al cuarto período con mucho optimismo, esperando la rentabilidad en todas las unidades de negocio.
La unidad de negocio de Sistemas Empresariales ha registrado unas pérdidas operativas de 70 millones de dólares, lo que se traduce en una mejora frente a las pérdidas de 252 millones de dólares del mismo período del año anterior. Sin embargo, no hay que olvidar que los números rojos de esta división se situaron en sólo 7 millones de dólares en el segundo trimestre de 2003, por lo que la propia HP y Wall Street esperaban mejores resultados.
En cualquier caso, ventas de equipos como los Superdome se han visto incrementadas cerca de un 65 por ciento respecto a 2002, cifra que además se prevé mejorar con la incorporación de toda la familia Integrity con Itanium 2. Sistemas Personales, por su parte, obtuvo una notable aportación de los laptop, cuyas ventas se incrementaron en un 54 por ciento y las ventas de desktop en un 18 por ciento. Con todo, sus pérdidas operativas se fijan en 56 millones de dólares, incrementándose frente a los 21 millones de dólares del segundo período.
Alguno de los motivos esgrimidos han sido los recortes de precios que realizó la firma en sus equipos personales esperando una caída del coste de los componentes que nunca llegó – la competencia no lo hizo y por eso ha vuelto a subir los precios hace unas semanas. Imagen e Impresión continúa su buena marcha con beneficios operativos de 739 millones de dólares y, en cuanto a servicios, los beneficios se situaron en los 337 millones de la misma moneda, con importante contratos de outsourcing.
