El comercio electrónico al consumidor (B2C) alcanzó el pasado año un volumen de negocio de 1.837,3 millones de euros, lo que supone un 20 por ciento más que en 2003.
Esto es al menos lo que se desprende del Estudio sobre Comercio Electrónico B2C 2005 presentado por la Asociación Española de Comercio Electrónico (AECE-FECEMD) y la entidad pública empresarial Red.es, realizado sobre una muestra de 6.000 particulares mayores de 14 años.
Como principales conclusiones, el estudio cita el incremento del 14 por ciento en el número de personas, casi 4 millones, mayores de 14 años, que compran a través de la Red; y el crecimiento del importe medio de compra por internauta, que se cifra en 464 euros, frente a los 438 del año anterior.
La comodidad que supone el acceso a la Red para la búsqueda y obtención de bienes y servicios se convierte en la razón principal de compra a través de Internet (58,9 por ciento), seguido de los mejores precios y promociones (27,2 por ciento) que se encuentran en este medio, y de la mayor oferta de productos (18,1 por ciento).
En relación a los productos y servicios adquiridos, los billetes de avión, barco, etc. (30,4 por ciento), los productos electrónicos (14 por ciento) y la compra de libros (12,7 por ciento) se alzan como los más demandados. El medio de pago preferido es la tarjeta de crédito en dos tercios de las transacciones, seguido del contra reembolso (un 18 por ciento).
En lo que respecta al grado de aceptación de la compra, únicamente el 8,3 por ciento de los encuestados señala haber tenido algún problema, logístico o de desperfectos, principalmente, en sus compras, frente al resto que declara estar satisfecho, aunque demanda un mayor incremento de seguridad, sobre todo, en los pagos.
Como conclusión al estudio, el presidente de AECE, Luis Cadalso, destacó las posibilidades de crecimiento de las ventas en el sector, aún muy lejos de la media europea. Según recordó, España tardaría 23 años en converger con los datos comunitarios al actual ritmo de crecimiento, pero celebró que el perfil del consumidor sea el de una persona joven (25 a 35 años), de nivel adquisitivo medio-alto, y con altos niveles educativos. Por ello, se mostró esperanzado “por el recorrido que aún hay para mejorar las cifras”, aunque, según se recoge el estudio, el 87 por ciento de los internautas no compradores no tiene intención de hacerlo o no lo hará nunca.
