Madrid se ha convertido en una de las primeras ciudades en utilizar las tecnologías de la información en materia de democracia electrónica. A diferencia de otras iniciativas en este tipo de participación ciudadana donde se han realizado pruebas piloto sin validez, las decisiones de los madrileños sí han resultado vinculantes para los gobernantes gracias, sobre todo, a una tecnología que aseguraba un voto único, secreto y seguro.
De este modo, la capital se ha convertido en un ejemplo para otras administraciones del mundo que quieren poner en marcha esta serie de iniciativas. Países como Suiza, Reino Unido, Argentina, Méjico y Australia ya han visitado Madrid para conocer de primera mano esta experiencia.
Desde que la capital empezó a realizar las primeras consultas en junio de 2004 en el distrito Centro, ya han votado a través de la red más de 4.000 madrileños y se han realizado consultas en Hotaleza, Barajas, Ciudad Lineal, Fuencarral-El Pardo, Latina, Villa de Vallecas y Villaverde. Y, al término de este año 2006, todos los madrileños habrán sido consultados sobre la gestión medioambiental de sus distritos.
Además, el resultado de estas experiencias ha sido positivo ya que los ciudadanos han manifestado su interés por este tipo de consultas electrónicas, su confianza en la tecnología y su buena valoración de las iniciativas.
